| miércoles, 02 de marzo de 2005 | Pasión por los fantasmas Sam Raimi y Takashi Shimizu, dos especialistas del género Siguiendo los pasos de "La llamada", "El grito" tomó por sorpresa a los japoneses. El título refiere a una maldición que pesa sobre una casa donde ocurrió un hecho violento. En la serie, que comenzó en el 2000, confluyen un lugar aparentemente ordinario y la presencia de unos fantasmas son la consecuencia del asesinato.
Cuando otras películas de terror japonesas tuvieron su remake, directores occidentales como Gore Verbinski, en "La llamada", o Walter Salles, en "Dark Water", habitualmente dieron su propia versión sobre la película original. Con "El grito", aunque está producido por el estadounidense Sam Raimi, el filme intenta escapar de las convenciones del género.
"Takashi Shimizu es un director joven especializado en cine de horror y en ese sentido se mostró respetuoso de versiones anteriores", contó Sarah Michelle Gellar, y añadió: "El habla muy poco inglés y eso se sumó a algunas dificultades que se dieron durante el rodaje debido a la tensión que generaba no tergiversar la historia. El, definitivamente, tenía una idea bien certera de lo que quería".
A lo largo de su trayectoria como realizador, Raimi creó una gran variedad de películas que van de la comedia al terror más gore. Su filmografía comenzó con "Posesión infernal", película de bajo presupuesto con la que se dio a conocer entre los aficionados al género y que se convirtió en un clásico que incluye humor negro, terror sobrenatural y el gore más duro. Siguió con "Ola de crímenes" (coescrita con sus amigos Joel y Ethan Coen), "Darkman", "Rápida y mortal", "Un plan sencillo", "Premonición" y la saga de "El Hombre Araña". enviar nota por e-mail | | |