| miércoles, 16 de febrero de 2005 | El imperio de la dualidad El cineasta aporta su sello a distintos géneros Takeshi Kitano sorprendió en 1997 con su película "Flores de fuego", que significó su reconocimiento internacional al recibir el León de Oro en el Festival de Venecia. En sus filmes -algunos de los cuales fueron estrenados sólo en video- mostró la violencia en distintos matices y desde originales puntos de vista que mostró en "Boiling Point" o "Sonatine" y, como actor, en "Violent Cop".
El director confirma en cada propuesta su manera de hacer cine en la cual confluyen personajes en el límite de la inexpresividad, silencios y un humor tangencial que puede cubrir un arco tan amplio como el que describe la ternura de "El verano de Kikujiro" hasta "Brother" donde la yakuza vuelve a aparecer con virulencia. Kitano surge así como un creador multifacético aunque suele terminar identificándose su trabajo con la violencia.
"Zatoichi", al ser un filme en el cual Kitano hacía confluir su interés y el de una de las productoras, podía tener signos que resultaran extraños a las obras del director. Sin embargo, Kitano descartó la posibilidad de buscar supuestos sobre su forma de filmar: "Creo que no deberían pensarse las cosas aisladamente o intentar colocarlas en compartimientos estancos".
"Pienso -añadió- que un director, autor o creador que firma su trabajo puede tomar un rumbo diferente, aunque aquel que sepa ver encontrará indicios conocidos en los lugares menos evidentes. Creo que aquí se ven detalles sugeridos como los juegos con la dualidad de algunos personajes, y también la forma en que se resuelven escenas donde puede verse cómo el mismo personaje baila de niño y como adulto". enviar nota por e-mail | | |