El resultado fiscal superó en 7 mil millones de pesos a lo pactado con el FMI

El Tesoro cerró 2004 con un superávit de 17 mil millones

Significa el 4% del PBI. Según el secretario de Hacienda, es la mejor performance en cuatro décadas

El Estado nacional logró en 2004 un superávit primario (sin computar pagos de deuda) de 17.360,8 millones de pesos, lo que equivale a un 4% del Producto Bruto Interno (PBI), anunció ayer el secretario de Hacienda, Carlos Mosse. El resultado positivo excede con creces el pautado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y, según el funcionario, es el mejor en "tres o cuatro décadas".

La diferencia positiva en las cuentas públicas se alcanzó pese a que en diciembre se registró un déficit de 2.063,3 millones de pesos, a consecuencia de una serie de medidas fiscales destinadas a mejorar los ingresos de beneficiarios de planes sociales y jubilados, así como la postergación del vencimiento del impuesto a las ganancias.

Según distintos analistas, este diferimiento permitió al gobierno podar el superávit primario en momentos en que los acreedores exigen que Argentina pague más.

El superávit primario del año pasado excedió en unos 7.000 millones de pesos la meta pactada en el ahora suspendido acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Mosse estimó que el consolidado de los estados nacional y provinciales serán del 5% del PBI.

En términos de PBI, la meta de superávit pactada con el Fondo Monetario fue de 2,4%. En tanto, el superávit financiero, tras el pago de deuda, llegó en 2004 a 11.657,8 millones de pesos, lo que equivale a un 2,5% del PBI.

En conferencia de prensa con periodistas acreditados, Mosse subrayó que el nivel de superávit primario alcanzado en 2004 no tiene registros "comparables en las últimas tres o cuatro décadas".

A su vez, el funcionario afirmó que tras el rojo de diciembre las cuentas del fisco en enero nuevamente mostrarán un saldo positivo, que estimó en el orden de los 1.000 millones de pesos.

Durante el análisis de los resultados, Mosse atribuyó las diferencias entre las proyecciones y pautas acordadas con los números de cierre del año a "discrepancias" en los niveles de crecimiento sobre los cuales se hicieron los cálculos.

"El presupuesto 2004 se hizo en 2003 sobre una base de crecimiento para ese año de 4,5% y de 4,5% para el siguiente y en ambos casos el crecimiento casi duplicó esas estimaciones", afirmó Mosse, quien al mismo tiempo enfatizó "que en 2005 no deberían repetirse tales discrepancias".

Puntualmente, el secretario señaló el altísimo nivel de recaudación que hubo en mayo de 2004 (12.360 millones de pesos) a raíz de la forma en que se liquidó el impuesto a las ganancias, y consideró que "no debe esperarse un fenómeno similar" en 2005. También adjudicó parte del desfasaje a que los "recursos crecieron mucho más de lo pensado", mientras que los gastos lo hicieron en menor escala y básicamente por las mejoras otorgadas en jubilaciones.


El consolidado superará el 5%
Sobre el resultado general de las cuentas públicas de la Nación y las provincias, Mosse calculó que el superávit primario consolidado final de 2004 estará por encima del 5%. En el acuerdo con el FMI el compromiso era de 3%.

Mosse destacó que para 2005 se calcula que el superávit fiscal rondará los 14.000 millones de pesos.

Más allá de estas proyecciones, el 2004 registró ingresos corrientes por 104.968 millones de pesos, contra gastos por 87.656 millones. El mayor nivel de gastos "estuvo signado por una mayor entrega de dinero a los sectores más desprotegidos, como el caso de los aumentos a los jubilados" que sólo en diciembre representó una erogación extraordinaria de 650 millones para el fisco.

Además, los mayores ingresos se transforman en egreso "de manera automática" en cuanto a transferencias a las provincias y fondos fiduciarios".

También, con el mayor nivel de ingresos el gobierno pudo paliar la crisis energética y reducir deuda al pagar casi 3.200 millones de dólares a los organismos internacionales y no emitir otros 2.000 millones de pesos destinados a rescatar bonos en el mercado local.

El resultado llega en momentos en que Argentina busca convencer a cientos de miles de acreedores alrededor del mundo de aceptar su oferta de reestructuración de deuda pública que implica aceptar grandes pérdidas.

Los acreedores extranjeros aseguran que el país "esconde" dinero y que está ofreciendo menos de lo que puede pagar.

El secretario de Hacienda presentó los resultados fiscales de 2004.