Constancia en la dieta

Tras analizar algunas de las dietas más famosas, una investigación concluye que todas logran una pérdida de peso modesta y que la clave no está en el tipo de dieta, sino en la constancia para mantenerla.

El estudio, publicado en la revista médica "Jama", relevó las condiciones de las dietas Atkins, Ornish, Zone y Weight Watchers, y detectó que el 42 por ciento de los voluntarios no llegó al final del estudio porque consideraba que la dieta era demasiado dura y con resultados discretos.

Muchas de ellas (populares por sus famosos adeptos: modelos, actores o cantantes) no cuentan con evidencias científicas que respalden sus supuestas bondades ni que definan cuál es la mejor.

Por eso, Michael Dansinger y su equipo, procedentes del Tufts-New England Medical Center (Estados Unidos) decidieron analizar los siguientes regímenes:

* Atkins: la famosa dieta ideada por el médico del mismo nombre que consiste en minimizar el consumo de hidratos de carbono (pastas, arroz y pan) aunque se pueden ingerir todas las grasas que se desee.

* Zone (dieta de "la zona"): cambia la clásica pirámide alimenticia y exige equilibrar el consumo de carbohidratos, proteínas y grasas en una proporción de 40, 30 y 30 por ciento, respectivamente. De este modo, la ingesta de los primeros se reduce drásticamente.

* Weight Watchers: restringe las calorías y el tamaño de las raciones. Este régimen otorga a los alimentos una puntuación y luego la persona puede combinarlos sin sobrepasar los puntos máximos.

* Ornish: también recibe el nombre del médico que la ideó, autor del best seller "Come más, pesa menos". Exige eliminar por completo las grasas.

Según se desprende del trabajo, con todas estas dietas la pérdida de peso es bastante modesta: "Era de esperar que los resultados entre los participantes que cumplieron el régimen fuesen mejores", comentaron los expertos.

La investigación evaluó durante un año a 160 personas con sobrepeso u obesidad (pesaban unos 100 kilogramos) que presentaban problemas como hipertensión o dislipidemia y que se sometieron a una de las cuatro dietas.

Además, a todos los participantes se les aconsejó consumir suplementos vitamínicos, realizar al menos una hora semanal de ejercicio y evitar apoyo externo para perder peso.

Tras el seguimiento, se constató que la cuarta parte de los participantes conseguía perder más del 5 por ciento de su peso corporal (unos cinco kilos) mientras el 10 por ciento perdía en torno a los 10. Más que del tipo de dieta, la cantidad perdida dependía del grado de fidelidad al régimen.

Además se constató que, al menos a corto plazo, estos regímenes no parecían ser perjudiciales para la salud y redujeron los niveles de colesterol "malo".

Los especialistas recomiendan que se ofrezcan al paciente varias opciones para poder decidir la que se ajusta más a las preferencias alimenticias y al estilo de vida.