La ganadería recupera su protagonismo

Luego de una larga década sobreviviendo a la competencia de la soja, la cadena ganadera está hoy en franca recuperación. Influye el ajuste tecnológico que permitió mantener el stock vacuno en los espacios que le dejó la soja, la reactivación del mercado interno (hacia donde va el 80% de la producción de algo menos de 3 millones de toneladas de carne anuales) y un gran dinamismo en las exportaciones.

Según los números de Ciccra, el año 2004 habría cerrado con exportaciones cercanas a las 540 mil toneladas, por un valor de mil millones de dólares. Para 2005 se esperan superar las 600 mil toneladas y batir el récord de los últimos 25 años. Al incremento del precio de la carne en el mercado mundial (1.700 dólares por tonelada) y el dinamismo que presentaron nuevos mercados como el ruso, se suman las ventajas del nuevo tipo de cambio.

"Desaparecieron un millón y medio de toneladas entre EEUU y Canadá, por la vaca loca, esto es el 18% del comercio mundial, si a eso le sumamos que la Unión Europea achica su producción, reduce los subsidios e incorpora a 10 países nuevos, las perspectivas son de demanda creciente y de incremento de precios", señaló Schiaritti.

Esta semana, la Comisión Europea difundió un pronóstico con perspectivas para el 2011 en el cual se estima que en los próximos seis años aumentará en cien mil toneladas las compras al exterior. Esta necesidad se volcaría hacia la oferta de Brasil y Argentina, más allá de la parálisis en las negociaciones Mercosur-UE para ampliar la cuota Hilton.


Cuello de botella
Las sombras para el sector vienen por el lado de la oferta. El año pasado los frigoríficos cerraron una faena superior en un 11% a 2003, aunque con una gran participación de hembras. "Las estadísticas no permiten ver claramente todavía si ese aumento es por mayor productividad o por el comienzo de un proceso de liquidación de stock", explicó el presidente de Ciccra, quien recordó que la ganadería viene de dos inviernos secos que comprometieron la producción.

Por otro lado, aclaró, "si uno camina por la Argentina se da cuenta que el aumento de tecnología en la producción es muy fuerte, hay rollos en cualquier lugar, en zonas antes impensadas hace cinco años atrás, la suplementación de granos es importante y con el cosechón de maíz que se espera este año lo será mucho más". Para Girardi, la apuesta de los productores por el sector ganadero se pone en evidencia no sólo por la creciente inversión en infraestructura sino por los precios de los campos . "No se consiguen y cuando se encuentran se paga lo que pide el propietario, hay una gran avidez para entrar en el negocio", dijo y agregó que "hay una gran demanda de semillas forrajeras, desde marzo muchos lotes de soja van a ir a pastura".

Las buenas oportunidades para la cadena de la carne tienen su lado oscuro en el incremento de los precios internos. "No creemos que la demanda exportadora influya en el aumento de los precios internos", señaló Schiaritti y, por eso, no espera un aumento de las retenciones.