Ex militares peruanos exigen la renuncia del presidente Toledo

Los sediciosos tomaron una comisaría y la municipalidad de la ciudad andina de Andahuaylas. Siete heridos

Lima. - Un grupo de ex militares, que pide la renuncia del impopular presidente peruano Alejandro Toledo, tomó ayer la comisaría de una ciudad andina, provocando un enfrentamiento que dejó siete heridos, informó el gobierno. Los insurgentes -dirigidos por Antauro Humala (líder de un movimiento nacionalista de inspiración castrense que busca revolucionar la política peruana)-, secuestraron a diez agentes en Andahuaylas, a unos 900 kilómetros al sureste de Lima, tras la incursión que se realizó a pocas horas de iniciado el nuevo año, y se apoderaron de sus armas, dijo la policía en un comunicado.

Según reportes de medios locales, los seguidores de Humala, apoyados por algunos pobladores de Andahuaylas, tomaron pacíficamente horas más tarde las instalaciones de la municipalidad exigiendo la renuncia de su alcalde. Los medios locales dijeron además que un miembro del grupo de Humala habría muerto, aunque no dieron más detalles.

Ante esta situación, Toledo suspendió su descanso en un exclusivo balneario en el norte del país y convocó a sus ministros a una reunión extraordinaria. "Se trata de un ataque violento a la comisaría. Un acto de carácter subversivo de un grupo marginal y minoritario en el que han resultado heridos varios policías", afirmó el primer ministro, Carlos Ferrero. "La fuerza armada y la policía nacional restablecerán el orden y serán sometidos a la justicia aquellos que la han quebrantado", agregó.

Según el hospital local, cinco agentes y dos civiles fueron heridos en el enfrentamiento. Dos están graves: un policía de 24 años que ya fue operado dos veces de una herida grave en una pierna, y un civil con un impacto de bala en el abdomen, dijo Adler Malpartida, director del hospital de Andahuaylas.

"Esta es una protesta castrense y estamos llanos a deponer las armas y a entregarnos siempre y cuando Toledo abandone el cargo", dijo Humala. "Para nosotros es un delincuente en palacio de gobierno, que tiene a su vez ministros delincuentes", afirmó.

Humala dirige a un grupo de ex soldados que en 2000 se sublevaron -liderados por su hermano Ollanta- contra el presidente Alberto Fujimori tras un escándalo de corrupción detonado por el jefe de espías, Vladimiro Montesinos.

Ollanta Humala retornó al ejército tras ser perdonado por el Congreso y Antauro Humala se dedicó al denominado movimiento etnocacerista, cuyos miembros usan prendas militares.


Cambios radicales
Este grupo plantea drásticos cambios en la política peruana como la nacionalización de la industria local, la legalización de la hoja de coca -materia prima para elaborar la cocaína- y la pena de muerte para los militares involucrados en la red de corrupción de Montesinos. "Este grupo minoritario intenta un mensaje completamente desenfocado de la realidad del país", afirmó el primer ministro Ferrero quien lo vinculó al narcotráfico. "Es evidente, por cuanto ellos mismos piden el libre cultivo de la coca, de donde probablemente obtienen su financiamiento", aseveró .

El legislador Villanueva aseguró que un grupo de aproximadamente 200 personas, algunos vistiendo prendas militares, tomaron la comisaría de Andahuaylas minutos antes de las 3 de la mañana de ayer.

El jefe de la policía, Félix Murazzo, dijo que está enviando refuerzos a la zona desde Lima pero no dio detalles.

El presidente del Congreso Antero Flores-Araoz criticó la acción de Humala. "Si lo señores de este movimiento quieren participar en política lo pueden hacer. Podían haber juntado firmas, inscrito su movimiento, pero tomar un cuartel de la policía y herir a sus miembros es la perpetración de un delito y no se puede permitir", dijo.

La imagen de Toledo, que culmina su mandato de cinco años en julio de 2006, se ha visto seriamente dañada por las múltiples denuncias de corrupción en su entorno. Su popularidad es de sólo 9%, según recientes encuestas. (Reuters)

Antauro Humala (der), líder de una controvertida organización ultranacionalista.