Sismo en Asia: siguen los problemas para la llegada de ayuda humanitaria

Una semana después de la devastadora catástrofe natural en el sur de Asia, millones de supervivientes siguen esperando ayuda con urgencia.

Muchas zonas afectadas están aisladas de las rutas de asistencia de las organizaciones humanitarias, infomaron portavoces. El miedo a las epidemias sigue creciendo y fuertes lluvias dificultan a los trabajadores humanitarios el trabajo.

A ello se une el pánico en el que se ven sumidos los supervivientes cada vez que se produce una réplica del terremoto.

"Tenemos grandes problemas logísticos", dijo Juergen Weyand, de la Cruz Roja alemana, desde la isla indonesia de Sumatra a la televisión n-tv. "Aquí en Medan hay material de ayuda de sobra, pero faltan medios de transporte. Alquilamos algunos helicópteros". Grandes zonas de la costa occidental aún son inalcanzables, según dijo.

En la región de Sumatra, numerosas áreas siguen sin recibir apoyo desde fuera, según informaciones peridísticas locales. Desde la localidad de Sigli, en el distrito de Aceh del Norte, hubo informaciones según las cuales cientos de supervivientes están enfermos y sufren hambre, ya que aún no ha llegado ayuda.

Según el periódico "Media Indonesia", en el distrito de Aceh Besar, murieron seis personas a causa de las heridas que presentaban porque no recibieron asistencia médica. Ayer se conocióo que unas 200 personas en campamentos para damnificados podrían estar enfermas de cólera.

También en las costas del sur de la India, réplicas, hospitales inundados, carreteras intransitables y falta de coordinación por parte del gobierno están dificultando todos los esfuerzos de ayuda.

Informaciones sobre los primeros casos de cólera en Sri Lanka fueron hoy desmentidas oficialemente. Lluvias duraderas en las zonas afectadas por la catástrofe hacen crecer el peligro de epidemias.

En vista del cada vez mayor número de desaparecidos, el temor es que en la región del océano Indico afectada hace una semana por el maremoto los muertos lleguen a ser más de 165.000.

Según informaciones de la Organización Mundial de la Salud, hasta cinco millones de personas se han quedado en la calle.

En Tailandia, actualmente hay cuatro depósitos de cadáveres improvisados en los que, en la afectada provincia de Phang Nga, hay casi 7.000 muertos.

El número oficial de muertos en Tailandia era ayer de unos 4.800, de ellos la mitad aproximadamente extranjeros occidentales. Trabajadores humanitarios en la zona habían sin embargo expresado el temor de que las víctimas mortales causadas por las olas gigantes sean más de 10.000 allí.

El gobierno de Indonesia, por su parte, teme hasta 100.000 muertos. (DPA)