 | viernes, 31 de diciembre de 2004 | Una paliza mortal Pedro Lescano y Patricia Azcurra vivían en Acebal. El era policía y trabajaba en Alvarez, donde según algunos testimonios mantenía una doble vida con otra mujer. La madrugada del 8 de febrero de 2001, imprevistamente decidió volver a su casa. Encontró a los dos hijos de la pareja durmiendo pero la mujer no estaba. Entonces esperó hasta que escuchó el ruido de un vehículo. Se asomó para husmear y divisó una camioneta en la que estaba su esposa acompañada por un muchacho. Cuando la mujer entró a la casa, discutieron y así se enteró que ella había estado en un motel con su acompañante. También supo que no era la primera vez que eso ocurría. Lescano la invitó a dar una vuelta en el auto. Condujo por un camino rural hasta un arroyo y allí la golpeó. El mismo contó después a un médico familiar los detalles de ese momento. Incluso apretó el gatillo de su arma, que no se disparó, y golpeó a Azcurra en la vagina. La mujer quedó tan grave que tuvieron que internarla en Rosario, donde murió cuatro días después. enviar nota por e-mail | | |