Vecinos furiosos mandaron a un ladrón al hospital

Un ladrón recibió una tremenda paliza a manos de un grupo de vecinos luego de cometer un robo en una vivienda de barrio Cristalería, el domingo a las 6 de la mañana. Fue cuando los dueños volvían a su casa y divisaron a un muchacho que salía del lugar con un bolso en sus manos. Alguien gritó y un grupo de vecinos rodeó al ladrón, que no tuvo tiempo de reaccionar. Tras la paliza el muchacho terminó internado en el hospital de Granadero Baigorria, luego de que una patrulla del Comando Radioeléctrico lo rescatara de los furiosos vecinos.

Amanecía cuando M.L., de 37 años, su marido y su hija regresaban de festejar el cumpleaños de 15 de la chica. Apenas llegaron a su casa de Villa del Parque al 4600 se toparon con un joven que abandonaba la vivienda con un bolso en sus manos. "Eso es mío", exclamó la adolescente cuando vio una de las prendas de vestir que asomaba del bolso.

Los gritos alertaron a los vecinos y varios salieron a la calle. Samuel Cáceres, de 19 años, quedó atónito al verse atrapado entre tantas personas que no tardaron en propinarle un vendaval de trompadas. "Le dieron para que tenga", ironizó una fuente policial.

Pero el bolso con ropa no era lo único que había robado. En un descampado cercano a la casa el asaltante había apilado dos ventiladores y un secarropas. Cuando el caco estaba malherido en el suelo, una patrulla del Comando Radioeléctrico llegó al lugar y lo rescató de la ira de los vecinos.

Los uniformados lo trasladaron detenido al Policlínico Eva Perón de Granadero Baigorria, donde quedó internado en una sala común. Los médicos de ese centro asistencial indicaron que presenta traumatismos en el rostro y el cráneo, y una herida en el lado izquierdo del tórax.

Una fuente de la subcomisaría 2ª indicó que Cáceres es "un viejo conocido en el barrio". Y agregó que su especialidad delictiva son los escruches, los robos que se cometen en propiedades cuando los dueños no están.