 | lunes, 06 de diciembre de 2004 | El Rey recibió el afecto de sus fieles de siempre Palito Ortega apostó a la nostalgia y a los éxitos U. G. Mauro / La Capital A Palito Ortega sólo le faltó parafrasear a Fray Luis de León, a su retorno a las clases y comenzar su recital diciendo "como decíamos ayer", en este regreso a la canción que encabezó tras veinte años de ausencia de los escenarios, seis de los cuales dedicó a la política en la Argentina, ante los maduros admiradores y muchos curiosos que ocuparon hasta la última localidad del teatro Broadway el sábado en la presentación de "El regreso del rey".
Mujeres de 60 que soñaban con "un muchacho así para la nena" o "nenas" que bailaron el twist "Despeinada" en los bailes de carnaval de Provincial o Gimnasia y Esgrima corearon todos los temas con los que Palito construyó, bajo la atenta mirada de sus hijos Julieta y Martín desde los palcos y la bandeja de sonido, una prolija crónica de su carrera acompañada por imágenes de archivo, fotos y fragmentos de sus películas en los que el artista parece querer imponerse un manto de olvido sobre su labor política.
Con casi una hora y media de demora, un sketch improcedente a cargo de las coristas dio pie al cantante que apostó a lo seguro con una andanada de éxitos. Nueve músicos liderados por Lalo Fransen, como-cantante en un tributo al Club del Clan en el que Palito tocó la batería, acompañaron correctamente al tucumano, que ahora canta un par de tonos más abajo.
Un set de temas lentos, un tributo a Elvis Presley, "La sonrisa de mamá", "La felicidad" y "Yo tengo fe", fueron apenas algunas de las concesiones por las que el público se llevó a su casa una sobredosis de imágenes y letras inocentes y melodías simples que desde siempre apuestan al sentimiento.
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