Hacen de tripas corazón

Así viven los hinchas platenses la semana de la definición del Apertura

"Si Estudiantes gana y gana Gimnasia, acá se arma un quilombo bárbaro: se viene la Tercera Guerra Mundial", simplificó un periodista de La Plata su visión del clima que vive una ciudad tan futbolera como Rosario.

"Yo prefiero que Gimnasia se vaya al descenso antes de que Estudiantes salga campeón", sorprendió un hincha tripero que nunca falta, pero el problema es que representa el pensamiento de la gran mayoría de los seguidores del Lobo.

Para muestra basta un botón. Y, si no, que lo cuente el propio Roberto Perfumo, que en 1994 dirigía a Gimnasia en un recordado partido que perdió de local contra Mandiyú, que no tan casualmente peleaba el descenso contra el también comprometido Estudiantes. Cómo habrá sido ese partido de sospechoso, que los hinchas triperos hasta pidieron un penal a favor de Mandiyú: "¿Cómo van a gritar penal si es en nuestra área?", me preguntó el masajista, según confió el propio Perfumo en una entrevista con el diario porteño Olé.

Por su parte, el director técnico de Gimnasia, Carlos Ischia, dirigió ayer la primera práctica de la semana y en principio continuará en el cargo hasta el final del torneo Apertura, según confió anoche una fuente platense a Ovacion.

Ischia había declarado antes de las elecciones que si no ganaba el oficialismo renunciaría al cargo -como le pasó a Miguel Angel Russo en Central cuando ganó Pablo Scarabino- pero el técnico continuaría al frente del equipo en los dos partidos que restan para terminar el torneo Apertura, y recién después cumpliría con su promesa de dejar el cargo si ganaba la oposición. Empero, todo indica que el Pelado continuará en el cargo hasta fin del torneo, por lo que el domingo estará en el banco de suplentes contra Newell's (ver aparte).

En realidad, el empate de Estudiantes contra Independiente le quitó presión a una de las ciudades con mayor rivalidad futbolística. "La ciudad no está convulsionada, pero hay un clima tenso", pintó la situación otro colega consultado.

Así como pasó el último domingo cuando Boca dejó para una mejor ocasión su proclamada grandeza y jugó con un equipo de suplentes, que fue al frente como debía pero que no podía jugar más ni mejor que de acuerdo a la capacidad de sus integrantes, la cuestión de la nobleza de los jugadores por salir a ganar en contraposición con el sentimiento de los hinchas por perjudicar al clásico rival volvió a aflorar en el esperado encuentro entre Newell's y Gimnasia, que puede definir el título del Apertura, nada menos.

El intríngulis se resolvería fácilmente si Vélez le ganara a Estudiantes en La Plata, por lo que Gimnasia quedaría liberado de su responsabilidad, dado que en caso de lograr un buen resultado no estaría beneficiando directamente a su clásico rival. Con todo, la historia es material como para un cuento del Negro Fontanarrosa. Como cuando un cronista platense se preguntó: "Si Estudiantes va ganando y Gimnasia gana sobre con un gol sobre la hora, ¿los jugadores triperos se van a animar a gritarlo?"

Ischia seguiría en Gimnasia hasta el final del torneo.