| sábado, 20 de noviembre de 2004 | Para Cancillería el reconocimiento de Brasil a los chinos como economía de mercado fijo la decisión nacional El gobierno dice tener las trincheras suficientes para evitar invasión china El secretario Chiaradía dijo que existen cinco "líneas de defensa" para contrarrestar el riesgo de dumping El gobierno aseguró ayer que cuenta con cinco "líneas de defensa" para contrarrestar los riesgos de la competencia china que preocupa a los empresarios locales, y admitió que la previa decisión de Brasil de reconocer al gigante asiático como economía de mercado condicionó su propia negociación.
"El gobierno otorgó el status de economía de mercado a China porque evaluó que los beneficios más los costos de haberlo hecho pesaban más que los costos por no haberlo hecho", señaló ayer el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Alfredo Chiaradía.
En tanto, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió nuevamente a brindar "plenas garantías" y "tranquilidad" a los empresarios temerosos de que el reconocimiento de China como economía de mercado vaya a afectar la producción nacional.
"Sé que a todos les preocupa este reconocimiento de economía de mercado que la Argentina ha hecho respecto de China. Nosotros damos plenas garantías, plena tranquilidad, a los productores de que el riesgo de que algo así ocurra, no existe", aclaró el jefe de Gabinete.
Según el funcionario, "la Argentina no ha renunciado a ninguna de las herramientas, de los instrumentos que tiene en materia de política económica y, por lo tanto, podrá hacerlos valer en caso de ser necesario".
Frente a las especulaciones que surgieron de los acuerdos firmados con Pekín y las preocupaciones de los empresarios, Chiaradía resaltó que en la evaluación de los riesgos "hay que ver el panorama general", y remarcó que "si Argentina no hubiera reconocido a China como economía de mercado habiéndolo hecho Brasil, el país hubiera tenido costos" más altos que los que implica la decisión que se tomó.
Sin querer admitir abiertamente que Argentina hubiera perdido el inconmensurable mercado chino frente a Brasil, el secretario dijo que los dos socios "tienen con China productos que compiten".
Falta de coordinación Al ser consultado sobre los motivos por los que estas negociaciones se hicieron de manera bilateral y no a nivel de Mercosur, Chiaradía reconoció que "hubo un diálogo" con Brasil pero las tratativas no se efectuaron en bloque "porque no se llegó a un estado de coordinación".
Por otra parte, señaló que el reconocimiento a China como economía de mercado por parte de los 150 miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) dentro de 10 años "es inexorable" y tras recordar que alrededor de 20 países ya lo hicieron, sostuvo que al ritmo con que se viene otorgando ese status pronto iban a sumarse más naciones.
"Si ese reconocimiento se da tarde ya no sirve para recobrar la relación", por eso "se llegó a la conclusión de que había que hacerlo", agregó.
Los empresarios temen que el status de economía de mercado acordado durante la reciente visita del presidente Hu Jintao al país abra las puertas a una posible invasión de productos del gigante asiático, cuya estructura de costos, entre ellos el laboral, es mucho más baja que la Argentina.
Líneas de defensa Sin embargo, el gobierno asegura que utilizará las herramientas a su alcance, como las políticas antidumping, para garantizar que los productos que ingresen no lo hagan a precios de subsidio.
Un alto directivo de la Unión Industrial Argentina (UIA) ratificó ayer la preocupación de ese importante sector económico por el acuerdo con China, al advertir que las víctimas "no son sólo los industriales, sino también los trabajadores".
Al abordar lo que llamó "líneas de defensa" contra los riesgos de "invasión" de la producción china, Chiaradía insistió en que Argentina cuenta, por un lado, con todas las normas de la OMC, y además en las negociaciones "se instrumentó un entendimiento político para el diálogo específico de productos y sectores sensibles en el caso particular de Argentina".
El secretario explicó que este diálogo no tiene carácter formal, sino que son "encuentros entre los responsables comerciales en los que se va a discutir sensibilidades y tiempos, es decir es una transición dentro de la transición", que implica que "durante un cierto período haya contemplación de nuestras necesidades", aunque el funcionario de Cancillería se negó a informar si éste entendimiento fue plasmado en un documento.
El resto de las líneas de defensa enumeradas por el diplomático se centran en voluntades y expectativas. "Está la manifestación de la voluntad del gobierno de no dejar desamparado ningún sector industrial ni en este caso (China) ni en ningún otro", señaló en referencia a la posibilidad de aplicar las herramientas de protección necesarias la mercado local en caso de necesidad.
En lo que rotuló como "expectativas racionales", Chiaradía dijo que "no sería lógico que China produzca una acción invasiva de productos" en un país que lo reconoció como economía de mercado "porque sería contraproducente con sus objetivos" de lograr que otros le otorguen ese status.
En esta línea también habló sobre la subvaluación actual de la moneda china, y señaló "que todo indica que en 1 o 3 años el yuan tiene que ir para arriba. Hay presiones para que eso ocurra, sobre todo de la Unión Europea", por lo que "la competitividad china disminuirá".
Una quinta línea es que en el memorandum de entendimiento firmado con China, su presidente, Hu Jintao, "se compromete a desarrollar con Argentina una relación estratégica. Este es un compromiso de buena fe de no dañar esta relación", indicó el funcionario.
Por último, al ser consultado sobre el por qué no hubo un diálogo previo con el sector privado para avanzar en las negociaciones con China, Chiaradía respondió que "un debate con los empresarios no hubiera sido conclusivo", ya que se habrían dado posiciones divergentes. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Chiaradía dijo que el gobierno evaluó los beneficios y los costos al otorgar el status. | | |