Más de 40 entidades se unieron en un foro del sector. Buscan que su peso económico se reconozca social y políticamente

La cadena agroindustrial va ahora por la fama

La eliminación de las retenciones y una estrategia de desarrollo figuran en la agenda de los empresarios

El sector agroindustrial es, junto con el turismo, el de mejor imagen positiva frente a la opinión pública y esto tiene que ver con que el 93% de los consultados creen que fue fundamental para la reactivación de la economía desde la crisis del 2001". La afirmación del consultor Rosendo Fraga, al comentar una encuesta realizada sobre 650 casos entre habitantes "urbanos" de Capital Federal, Gran Buenos Aires, Rosario, Rafaela, Córdoba y Río Cuarto, sonó dulce a los oídos de los empresarios que se reunieron el martes en Buenos Aires para participar de la constitución del Foro de la Cadena Agroindustrial.

Esos números, y la conclusión de Fraga respecto de que esta percepción habilitaba a pensar que las políticas favor del sector podían ser traccionadoras de votos, era lo que querían escuchar los popes de la agroindustria para apoyar su más novedosa obsesión: trascender las fronteras del sector y ser reconocidos por la opinión pública y la clase política como una cadena de peso.

"Generamos el 45% del valor agregado nacional, el 36% del empleo y más de la mitad de las exportaciones, a través de las retenciones y otras transferencias contribuimos a mejorar los problemas sociales del país, es importante que eso lo reconozca la sociedad y el Estado", señaló Benito Legeren, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), y uno de los artífices, junto a Luciano Miguens, titular de la Sociedad Rural, de la reunión de representantes de más de 40 cadenas de la agroindustria en un foro de representación permanente.

"La constitución del foro cristaliza un trabajo de dos años, deberemos seguramente ser muy cuidadosos porque se trata de una cadena de cadenas, y hay temas conflictivos dentro de los sectores y entre los sectores que la integran", señaló Miguens, para destacar los límites que por ahora tiene este punto de encuentro.

La eliminación de las retenciones, las obras de infraestructura y la coordinación de acciones con el Estado para ganar nuevos mercados y luchar contra el proteccionismo son los principales puntos de consenso. Legeren señaló que "desde la semana próxima el foro comenzará a trabajar para presentar una propuesta de políticas para el desarrollo del sector agropecuario, que incluirá temas tributarios, y un plan de acción para dar a conocer a la opinión pública la importancia que tiene el sector para la sociedad".

Más allá de ese consenso informal, cada paso será debatido con mucho cuidado. Desde una eventual institucionalización del foro (con presidente y todo) hasta la estrategia política, terreno en el cual los dirigentes presentes en el auditorio del hotel Marriot realizaron una exhibición de biodiversidad cuando aplaudieron por igual dos definiciones que dejaron los panelistas extranjeros: Andrés Santa Cruz López, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (Chile) y Julio César Augusto Pompei, asesor del secretario de Ciencia y Tecnología y Desarrollo Económico de San Pablo.

"En el Parlamente de Brasil hay 290 diputados sobre 570 que pertenecen a la bancada de agronegocios", señaló Pompei en medio de un cerrado aplauso. "En Chile no hay diputados que representen al sector empresarial sino de toda la comunidad y me alegro de ello porque el sector tiene que buscar su desarrollo en las ventajas competitivas y no en políticas corporativistas", dijo Santa Cruz López, en medio de un cerrado aplauso.

El intendente de Rafaela, Omar Perotti, uno de los santafesinos que participaron de la reunión, consideró "importante que la cadena agroindustrial se conforme como tal y defina una estrategia de acción". Mencionó como un ejemplo de la falta de lobby del sector la última gran crisis de la lechería. "Cuando empezó la caída de precios en el 99 loslos tamberos quedaron solos mientras que a la industria automotriz le otorgaban millones a través del Plan Canje". Sin embargo, aclaró que "es más importante que el sector desarrolle una estrategia productiva que hacer un lobby para meter más diputados o funcionarios, eso sería un error".

De hecho, el sector agropecuario, o algún sector del sector, ha tenido en sus épocas una incidencia directa en las políticas de gobierno. Ese dato no fue motivo de análisis de los intelectuales que protagonizaron el primer panel del encuentro. Natalio Botana, Félix Luna y Marcos Aguinis hicieron hincapié en la histórica antinomia entre el campo y la industria, que consideraron que fue saldada con el concepto de cadena agroindustrial.

Los acuerdos con China y el reconocimiento argentino como economía de mercado (limitando por ende los mecanismos de protección industrial) serán una prueba para este concepto. Alberto Alvarez Gaiani, integrante del foro, titular de la Coordinadora de Productos Alimenticios (Copal) pero también presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) se anticipó: "No por expandir las exportaciones a ese país vamos a dejar que entren importados que destruyan nuestra industria", dijo.

Roberto García, Eduardo Van der Kooy, Joaquín Morales Solá y Mariano Grondona sufrieron, en el panel sobre la visión de los comunicadores, el embate de los empresarios presentes que demandaron que las noticias del sector sean publicadas en las tapas de los diarios porteños. Salvo Grondona, que tiene campo, el resto respondió, palabras más o menos, que porque no lo conocían.

La obsesión mediática de los agroempresarios encontró algo de paz, en cambio, con la disertación de Rosendo Fraga, encargado de presentar una encuesta sobre "la imagen pública de la cadena agroindustrial argentina". El sondeo, que incluyó una encuesta motivacional, una con líderes de opinión y otra cuantitativa en aglomerados urbanos, concluyó que la percepción del sector es positiva ya que "se considera que es el que más ha contribuido a la reactivación". Los números indican que el 54% de los consultados tiene una imagen positiva de la cadena, que el 93% considera que es importante para el desarrollo del país y que el 43% cree que es el que más contribuyó a la reactivación económica, frente al 11% de la industria automotriz o el 10% del turismo.

Fraga explicó que de la encuesta surge una vinculación del sector agropecuario con el empleo y la exportación pero también es percibido como uno de los sectores que se considera más protegido o subsidiado. Fraga se apresuró a aclarar que "no se puede pretender una lógica en la opinión pública, es compleja y ambigua".

Para Angel Girardi, presidente de Aprocaboa, "el campo no sólo no ha sido subsidiado sino que fue solidario en medio de la crisis, creo que en la medida que esto se conozca se va a potenciar todo el país".

El presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Federico Boglione, destacó que "el sector de la agroindustria es el motor de la economía argentina, por eso es importante que se conozca que la Argentina está preparada para alimentar a 300 millones de personas".

Las entidades que integran el Foro de la Cadena Agroindustrial Argentina son: Acta, Apea, ASA, Bolsas de Cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Mendoza, Cámara Algodonera Argentina, Caprove, Cámara Argentina de Consignatarios de Ganado, Cafma, Capia, Cámara Argentina del Maní, Ciara, Ciafa, Cámara de Legumbres de la República Argentina, Cámara de Puertos Privados Comerciales, Casafe, Cámara de Semilleristas de la Bolsa de Cereales, Centro Azucarero Argentino, Centro de Consignatarios de Productos del País, Centro de Consignatarios Directos de Hacienda, Centro de Corredores de Cereales de Rosario, Centro de Corredores y Agentes de la Bolsa de Cereales de Bs. As., Centro de Corredores, Comisionistas y Consignatarios de Cereales y Oleaginosos de Santa Fe, Cepa, Centro de Exportadores de Cereales, Centro de la Industria Lechera, CRA, Copal, Fadeeac, Federación Argentina de la Industria Molinera y la Federación de Acopiadores de Cereales, entre otros.

La cadena agroindustrial se lanzó en Buenos Aires.