Una tradición familiar

Maximiliano Ferreyra cruza todos los días la ciudad para abrir la carnicería de España y Centeno. Este "hincha enfermo" de Rosario Central, "de esos que se pelean y discuten", vive en Empalme Graneros. Su madre tenía hasta hace poco una carnicería familiar por Génova a metros de Provincias Unidas y él abrió su propio local hace un año. Está casado y tiene una beba de 2 años de enormes ojos azules, pelo rubio y una sonrisa compradora. Una de sus hermanas comentó "que ser carnicero" es como una tradición familiar. "Mi abuelo lo era, mi mamá tenía una carnicería y Maxi aprendió trabajando en los súper". Antes de abrir el local en España y Centeno, trabajó en España y Garibaldi. Está en la zona sur desde hace cuatro años.