Ruidosa movilización contra el encuentro oficial

Sindicatos, organizaciones de derechos humanos, partidos políticos, centros de estudiantes y participantes del Congreso de laS lenguaS, que se realiza en forma paralela al oficial, se movilizaron ayer por el centro de la ciudad para mostrar la situación de los sectores sociales postergados y reivindicar los derechos de los pueblos aborígenes.

La marcha, que se desarrolló sin ningún tipo de incidente, comenzó poco después de las 10.30. La columna mayor partió de la plaza Pringles y posteriormente se le sumaron otras dos formaciones.

Portando pancartas, banderas, "espejitos de colores" y entonando cánticos, los manifestantes avanzaron hacia El Círculo, pero se encontraron con el férreo operativo policial que había vallado todo la zona.

Minutos después, y sin que se produjeran desbordes, los militantes arrojaron unas cajas de cartón que, según los cánticos, "eran los regalos que se les devolvían a los conquistadores españoles", haciéndose luego lo mismo con los "espejitos".

La marcha terminó en cercanía del Centro Cultural Bernardino Rivadavia, donde se leyó un documento. Las palabras más resonantes fueron de integrantes de comunidades aborígenes: "Soy mujer mocoví de Santa Fe y digo que en este Congreso de la Lengua pretendemos que España, después de 512 años de aculturización forzada, reconozca las lenguas de los pueblos originarios de Latinoamérica".

La marcha intentó llegar a El Círculo pero fue detenida.