Lucha y juega

Hay un equipo que crece desde el pie

Sergio Faletto / La Capital

Central consolidó su esquema. Alcanzó el equilibrio necesario. Mixturó con certeza los recursos existentes. Y ahora avanza a paso firme. Con un equipo que lucha con denuedo y juega con criterio. Confrontando sin complejos con adversarios complicados. Superando escollos de envergadura. Y sumando puntos. Suficientes para hablar de estupenda campaña contemplando el débil punto de partida. Necesarios para proyectarse con optimismo hacia el 2005.

El equipo canalla superó con claridad al difícil Banfield de César Falcioni. Un rival que mantiene su estilo ordenado y eficaz más allá de los vaivenes del partido. Pero al que Central supo vulnerar con un trabajo sustentado en la convicción táctica. Tanto para pelear en el primer tiempo como para jugar en el segundo. Porque la etapa inicial fue de disputa férrea en el medio, donde la actitud y el temperamento de Damián Ledesma fueron determinantes para que su equipo no sea llevado por delante. Y porque en el complemento los de Zof y Cuffaro ensamblaron justo en tiempo y forma para dejar sin resistencia al Taladro, que quedó muy disminuido cuando Collado expulsó a Leiva.

Banfield no se alteró cuando Ledesma puso en ventaja a Central. Pero Central tampoco se inquietó cuando un gol compartido entre Ceballos y Moreira puso la igualdad. Un claro ejemplo que el compromiso en marcha era entre dos equipos que transitan por el ciclo de la madurez.

En este contexto de dos sistemas bien definidos, la Academia prevaleció por su vocación ofensiva y precisión. Por eso las excursiones canallas fueron más eficientes que la aislada ocasión que dilapidó Tavio. Entonces fue Central el que llegó a la estación de la victoria. Y allí festejó una vez más este gran momento futbolístico, porque hay equipo.

Tercer gol canalla y segundo de Villa, el goleador auriazul.