EEUU lanza en Falluya la mayor ofensiva desde la caída de Saddam

Los marines atacan desde dos direcciones. Ayer rompieron el primer anillo de defensa de la ciudad sunita

Falluya.- Unos 12 mil marines estadounidenses y soldados del nuevo ejército iraquí penetraron ayer en profundidad en Falluya, rompiendo el primer círculo de resistencia de los insurgentes refugiados en esta ciudad del centro de Irak. La ofensiva comenzó la noche del domingo. Las tropas avanzaban apoyadas por artillería, helicópteros artillados y aviones, en la mayor operación militar desde que en abril de 2003 EEUU invadió Irak y depuso al régimen de Saddam Hussein.

Al caer la noche de ayer, los soldados estadounidenses avanzaron lentamente en la urbanización de Jolan, en el noroeste de la ciudad. Jolan es un laberinto de calles tortuosas donde los combatientes sunitas se han atrincherado. Artillería, tanques y cazabombarderos atacaron el extremo norte del distrito tratando de ablandar las defensas.

Al mismo tiempo, otra fuerza de 4.000 efectivos avanzó en el distrito de Askari, al noreste, en el primer ataque en gran escala contra una zona controlada por los insurgentes. Con estos dos ataques, la fuerza atacante logró romper el primer anillo de defensa, de los dos dispuestos por los insurgentes.


Dos anillos de defensa
Unos 5.000 rebeldes resisten en la ciudad. Según información de la inteligencia militar, el primer anillo es más débil, pero contaría con numerosas trampas explosivas, y de hecho ayer los ingenieros militares de los marines desarmaron muchas de ellas. El segundo anillo de defensa, al interior de la ciudad, es el más fuerte y estaría formado por nidos de ametralladora, cañones livianos y milicianos con lanzagranadas antitanque. En cuanto a la composición de la insurgencia, que se apoderó de Falluya desde el año pasado, es muy variada: desde la formación terrorista Tawid al Yihad del jordano Abu Mussab Al Zarqawui, a grupos de ex integrantes del partido de Saddam Hussein, el Baath. Predominarían sin embargo los grupos islámicos sunitas, aunque de distinto signo y grado de radicalización. Es muy difícil determinar si existe un mando militar centralizado, aunque todo indica que no lo habría.

En la primera noche de combates, entre el domingo y el lunes, los atacantes ya habían logrado tomar el principal hospital de la ciudad y los dos puentes que unen ambas riberas del río Eufrates.

Según el jefe de las fuerzas estadounidenses podría registrarse "un gran enfrentamiento" en el centro de Falluya mientras la fuerza de 12.000 soldados -unos 10 mil estadounidenses y 2000 iraquíes- intenta retomar el control de la ciudad, corazón del "triángulo sunita". El general George Casey dijo que entre un 50 y un 70% de los aproximadamente 200.000 habitantes de la ciudad la habían abandonado. Eso indicaría sin embargo que quedan aún en Falluya entre 60.000 y 100.000 civiles a merced de los combates.

Según Casey, algunos combatientes lograron salir de la ciudad, en tanto otros se infiltraron hacia el interior al romperse el primer anillo de resistencia. El general aseguró que los rebeldes iraquíes eran "un grupo amorfo de terroristas e insurgentes" y que ningún grupo parecía estar dirigiendo la resistencia. El jefe militar pronosticó que los combatientes iraquíes situados ahora en los suburbios "tal vez se dirijan luego al centro de la ciudad, donde posiblemente habrá un gran enfrentamiento".

Fuerzas del regimiento británico "Black Watch", recientemente desplazadas desde el sur shiíta por pedido de EEUU, estaban actuando en la margen occidental del río Eufrates para detener cualquier movimiento de los combatientes entre Bagdad y Falluya, y prevenir así un ataque desde la retaguardia.

El comando militar estadounidense había estimado ayer a la tarde que 42 combatientes murieron en diferentes puntos de Falluya desde el inicio de la ofensiva. Cuatro extranjeros -entre ellos dos marroquíes - fueron capturados cuando soldados estadounidenses e iraquíes atacaron el primer objetivo, el principal hospital de Falluya que, según el ejército de Estados Unidos y el primer ministro interino de Irak, Iyad Alawi, estaba bajo control de la insurgencia y actuaba como un centro de propaganda.

Médicos locales dijeron que 10 personas murieron y 11 fueron heridas en el curso de la primera noche, durante los bombardeos.

Ayer la mañana, proyectiles de artillería y de mortero cayeron sobre objetivos dentro de la ciudad y en los suburbios, y un caza de Estados Unidos disparó cohetes contra presuntas posiciones de la resistencia. Antes del amanecer, cazabombarderos lanzaron cuatro bombas de 225 kilogramos, provocando enormes bolas de fuego. Estados Unidos dijo que dos infantes de marina murieron cuando su topadora volcó y cayó al río Eufrates. Al menos otros cuatro marines habían sido heridos en combate, según supo la CNN.


Relatos de la batalla
El periodista de la AP Edward Harris, quien está con los infantes de marina cerca de la estación ferroviaria situada en el extremo norte de Falluya, dijo que el distrito de Jolan fue atacado con aviones y con artillería de tanques para ablandar las defensas. Otro periodista que avanza junto con los marines, Karl Penhaul, de la CNN, reportó que escuchaba constantes explosiones y fuego de ametralladoras y describió a las balas trazantes cruzando el cielo nocturno. También escuchaba, entre el estruendo de la batalla, a los insurgentes cantando en árabe "Dios es grande", una expresión islámica tradicional.

Por otra parte, parecen haber comenzado las deserciones entre soldados iraquíes que pelean junto a los norteamericanos. Clérigos de Falluya dijeron que estas tropas eran "el látigo de los ocupantes contra sus propios compatriotas. Juramos por Dios que los mataremos como corderos", amenazaron en un comunicado. La mayoría de los soldados iraquíes que participa en la acción de Falluya no es árabe sunita, sino que pertenece a la minoría kurda o a la mayoría shiíta.