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 lunes, 08 de noviembre de 2004  
Insólita confesión de un paramilitar en Colombia

Bogotá. - La escalofriante confesión de un joven paramilitar colombiano que reconoció haber asesinado a 137 personas en los barrios marginales de Bogotá por orden del Bloque Capital, de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), estremeció a los jueces que lo condenaron por 37 muertes. Jaime Marulanda, de 26 años y conocido con el alias de "El Chiquitín" por su 1,50 metro de estatura, confesó que en su función de patrullero de los paramilitares que operan en Bogotá asesinó a 137 personas por orden de sus jefes, contradiciendo así las imputaciones del fiscal del caso que sólo lo acusó de 37 homicidios.

"El fiscal me acepta cargos por 37, cuando yo le informé que son 137. No me explico por qué. Yo maté fue a 137 personas. Ese era mi trabajo, cumplía con lo que me ordenaban", señaló el paramilitar en la audiencia realizada este viernes, según reseñó ayer el diario bogotano El Tiempo.

"El Chiquitín", recluido en la cárcel del municipio de Acacías, donde aprende a leer y escribir, fue condenado a 28 años de prisión por los crímenes de 37 personas -en su gran mayoría jóvenes, menores de edad, líderes comunales y de izquierda- entre abril y noviembre de 2002.

Su captura se produjo en octubre de 2002 gracias a que su novia Lucía Londoño, de 14 años, lo delató ante las autoridades porque asesinó a un hombre que vivía con ella. "Ellos trabajan para las autodefensas de Colombia y tienen un patrón que cada mes les da plata. Por cada cabeza o persona que matan les pagan 400.000 pesos (unos 150 dólares)", señaló en su momento Londoño.

El testimonio de la menor fue clave para develar las masacres silenciosas que día a día se dan en las barriadas del sur de Bogotá, epicentro de una cruenta lucha entre los paramilitares y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). Su declaración ante el juzgado le costó la vida a la joven de 14 años. Su cadáver apareció el 7 de noviembre de 2002 en una apartada zona de Bogotá. (DPA)
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