| sábado, 06 de noviembre de 2004 | Pasó 5 horas preso por una patente melliza El dominio de su Ford Escort tiene una copia con pedido de captura que usa un Fiat Spazio de Buenos Aires "Me estoy comiendo un garrón y no tengo nada que ver". Las últimas 96 horas de Mauro Doboletta fueron de no creer. El martes circulaba con su auto y fue detenido por un control rutinario de la Patrulla Urbana. Los efectivos detectaron que la patente del vehículo tenía un pedido de captura emitido en la ciudad de Quilmes y allí comenzó la odisea para este joven de 26 años. La chapa en cuestión correspondía a un Fiat Spazio y el muchacho es propietario de un Ford Escort. Teniendo todos los papeles del vehículo en regla, Doboletta quedó cinco horas detenido "por averiguación de antecedentes" en la seccional 13ª y su Escort blanco continúa secuestrado.
"En la misma comisaría me decían «esto debe ser un error» pero igual me detuvieron y me secuestraron el auto", explicó el joven. Todo comenzó el martes cuando Doboletta circulaba por Juan Domingo Perón y Felipe Moré. Allí, frente al Distrito Oeste, lo detuvo la Patrulla Urbana para un control rutinario. "Me pidieron la documentación del vehículo y les entregué la tarjeta verde, la patente al día, el seguro y el registro de conductor. Cuando hicieron el chequeó saltó que la patente tenía un pedido de captura de un juzgado de Quilmes y que pertenecía a un Fiat Spazio radicado en Buenos Aires", explicó el joven.
"Los de la Patrulla me dijeron «debe tratarse de un error. El pedido es sobre un Fiat y este es un Escort. Quizás se equivocaron al tipiar una letra de la patente». Controlaron los números de chasis y motor con la tarjeta verde y estaba todo correcto. Sólo era la patente", contó Doboletta. Los uniformados trasladaron al joven y su auto a la seccional 13ª donde estuvo demorado "por averiguación de antecedentes" durante 5 horas. "Uno de los policías me dijo: «Mirá flaco, vos en este momento son un choro y de acá no te podés mover. Y si de Quilmes me dicen que te mande para allá, te esposo y te vas para allá»", recordó Doboletta.
Desde entonces, este muchacho sin antecedentes penales comenzó a peregrinar entre la seccional y los Tribunales para liberar su auto. "La causa desde Quilmes pasó al juzgado Correccional 2ª", contó indignado Doboletta, quien compró el auto en 1996 y lo transfirió en 1997, aunque el pedido de captura data de 1998. "El registro automotor ya envió un informe donde dice que la patente TFV844, que es la que supuestamente tiene el pedido de captura, corresponde a mí vehículo y que todo está en regla. Pero el auto sigue secuestrado".
Doboletta sostiene "que el procedimiento está mal hecho y por eso nadie se quiere ensuciar". El joven comentó que ayer pudo hablar con el juez Juan Alarcón. "Me quería hacer firmar un papel donde me entregaban el auto pero quedaba imputado por el encubrimiento del robo de la chapa. Y no se lo firmé. Si lo hacía me daban el auto y quedaba pegado como encubridor. Y eso se lo planteamos al juez con mi abogada", explicó Doboletta, quien ahora tiene que esperar "que la investigación prosiga" para que liberen su Escort blanco. enviar nota por e-mail | | |