Entrenamiento: La alegría reinó entre Las Leonas

El plantel realizó ayer el último trabajo en cancha de cara al comienzo del certamen

Existen momentos en donde la experiencia y confianza de un equipo se ven reflejadas. En este caso, el entrenamiento que llevaron a cabo ayer Las Leonas, el último de cara al comienzo del Champions Trophy que comienza hoy, en las instalaciones del Jockey Club fue una fiel muestra de que esos dos ingredientes no están ausentes. Aunque un trabajo de esas características el día previo a las competencias es tradicional en el plantel que dirige Sergio Vigil.

Las tareas que realizó el plantel fueron en horario matutino (desde las 9.30) y tuvieron lugar en un ambiente por demás de distendido. Los primeros movimientos fueron recreativos y estuvieron a cargo del preparador físico Luis Barrionuevo.

Luego se dividieron en dos grupos para practicar córners cortos, sin arquera. Y finalmente jugaron un partido en donde participó el plantel y el cuerpo técnico, que tuvo al seleccionado australiano como espectador de uno de los momentos más coloridos de la jornada, debido a que entrenaron al término de la práctica argentina.

Vigil reunió a las jugadoras en el centro de la cancha y todos -incluso los integrantes del cuerpo técnico- comenzaron a colocarse pecheras para disputar el cotejo más disfrutado. Todos los integrantes del plantel saltaron a la cancha con ganas de jugarlo, mientras que el profe Barrionuevo "afiló" el pito para hacer de árbitro.

La primera interrupción la tuvo que hacer Cachito Vigil, que como siempre estuvo en todos los detalles, quien debió frenar a la gente que estaba arreglando los últimos detalles en la cancha porque le estaban sacando el arco de su lugar.

Durante el desarrollo se escucharon cargadas y chistes, entre otras cosas. Pero el que se llevó todos los piropos de la platea femenina que se encontraba presenciando el enfrentamiento fue el videoman Cristian Pollo Werner que, dicho sea de paso, manifestó que no firmaría autógrafos una vez finalizada la práctica.

Sólo como dato anecdótico, el conjunto de pechera fue el vencedor por 4 a 3.

Luego del "picadito" todo era motivo para sonreír y festejar. Varias de las jugadoras formaron un trencito y cantaron haciendo alusión a ciertas compañeras.

Más tarde, un grupo del plantel que seguía con ganas de divertirse y postergar el camino hacia el colectivo que las trasladaría al hotel formó un scrum buscando oponente, pero no lo halló.

Finalmente, cuando todos levantaban sus bolsos, Vigil agradeció a la Leona que más pases le había dado durante el partido y manifestó: "Me volvió la confianza, me equivoqué en una sola...".

Así fue el último entrenamiento de Las Leonas de cara al inicio de uno de los torneos más importantes del circuito mundial, y con el ingrediente especial de que será en casa.

El plantel y el cuerpo técnico del seleccionado nacional disputaron un partido en un ambiente distendido.