| sábado, 06 de noviembre de 2004 | Profanaron un panteón familiar en el cementerio La Piedad y robaron el cajón Para las autoridades "sólo un entendido puede hacer algo así sin dejar rastro" Un nicho del cementerio La Piedad fue profanado y el cajón que se encontraba en su interior fue robado. Así lo denunció ayer la familia Randizzi, que luego de ser alertada por el olor que salía del panteón familiar descubrió que la parte de madera del cajón donde estaba sepultado uno de sus parientes había desaparecido. "Nos llamó la atención el olor y el jueves (por anteayer) descubrimos que los ladrones sólo habían dejado la parte de zinc del cajón (donde se encuentra el cadáver)", contó a ayer María Inés Tocalli, hija del fallecido. Las autoridades de la Dirección de Cementerios aseguraron que se harán cargo del hecho, pero además señalaron que "una cosa como esta la tiene que hacer alguien que sepa cómo sacar la madera y abrir el nicho sin romperlo".
El hombre falleció el 18 de julio pasado y fue sepultado en el panteón de la familia de su esposa, Celestina Randizzi, donde durante las últimas semanas empezó a percibirse un olor persistente.
"Era nauseabundo. Reclamamos en la cochería Bassi y nos dijeron que podía ser la válvula del cajón y también fuimos a la administración del cementerio; pero nadie nos dio una respuesta", relató María Inés.
Fue entonces que madre e hija autorizaron a una persona a que abriera el nicho y chequeara qué pasaba. Allí descubrieron que se habían robado el cajón y anteayer volvió al cementerio con la policía para constatar el robo y dejar asentada la denuncia.
"Esta es una profanación terrible", dijo indignada María Inés. Pero además no sólo reclamó que "alguien se haga cargo del robo y reponga el cajón que se llevaron", sino que además afirmó: "Ahora quién nos asegura a nosotros que el cadáver que está en ese lugar es el de mi papá. Vamos a proceder con un abogado en la Justicia provincial para constatar la identidad del cuerpo".
Las autoridades admitieron que se trató de "una profanación imperdonable" y el subdirector General de Defunciones y Cementerios del municipio, Juan Carlos Ottinger, señaló: "Esto es algo que no lo hace una sola persona y hay que saber cómo hacerlo, sin dejar rastros ni romper el mármol. Tiene que estar al tanto de que allí hay un cajón de valor, porque hay 60 mil tumbas en el cementerio La Piedad".
El funcionario no sólo aseguró que se hará cargo "en forma personal" de la reposición del ataúd, sino que además adelantó que "una vez que la policía nos entregue las actuaciones realizadas se va a avanzar en una investigación administrativa dentro de la Municipalidad". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Los familiares se mostraron indignados. | | |