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 domingo, 31 de octubre de 2004

Comicios presidenciales. El perfil de los dos principales candidatos
"El guapo" no da nada por perdido

Montevideo. - El candidato presidencial del partido Nacional o "blanco", Jorge Larrañaga, no da nada por perdido en las elecciones generales de hoy y haciendo gala de su apodo de «el guapo» confía en que será el próximo presidente de Uruguay.

Abogado de 48 años, oriundo del departamento de Paysandú, Larrañaga se ganó la nominación en junio en las elecciones internas partidarias dejando en el camino a Luis Alberto Lacalle, presidente de Uruguay entre 1990-1995 y forjando así una renovación en las filas de su partido de centro, con 168 años de existencia.

"Están a tiro de lazo", insiste Larrañaga, recurriendo al dicho del campo y aludiendo a la coalición política de izquierda Frente Amplio de su rival Tabaré Vázquez, que lidera las encuestas. Larrañaga se ufana se haberse ganado su apodo de «el guapo» desde su infancia en Paysandú donde se recuerda que no hacía el quite a las riñas callejeras de ser necesario.

Casado con la maestra Ana Vidal, tienen tres hijos y la esposa tuvo que abandonar su bajo perfil en política, para salir al cruce de una denuncia periodística de que su marido la golpeaba, en uno de los peores escándalos de la campaña proselitista.

Larrañaga acusó a la izquierda de apelar a esos recursos para dañar su imagen, teniendo en cuenta que se presenta como el rival mas serio del socialista Tabaré Vázquez a quien las encuestas lo ubican primero. Los encuestadores dan a Larrañaga hasta el 30%, a distancia de Vázquez a quien le adjudican hasta el 52%.

Larrañaga comenzó en plena dictadura militar en 1982 su actividad política como secretario de la Comisión Departamental Nacionalista, la cual presidió entre 1985 y 1989. Fue edil y dos veces electo intendente (alcalde) de Paysandú, uno de los departamentos más industriales recostado al río Uruguay.

Entre 2000 y hasta 2004 -cuando renunció para dedicarse a la campaña proselitista- fue senador y en no pocas oportunidades discrepó con sus propios compañeros partidarios siendo uno de los que más insistió en poner fin a la coalición de gobierno que se había instrumentado con el Partido Colorado del actual presidente Jorge Batlle. La coalición se rompió en 2002 en medio de fuerte crisis económica y financiera.

Larrañaga ha puesto énfasis en cuestiones que hacen al mejoramiento social, de lucha contra la indigencia y de brindar cobijo a menores y ancianos indigentes en la calle. Al mismo tiempo, en el programa de gobierno de "Compromiso Nacional", Larrañaga -quien lleva como candidato a la vicepresidencia a Sergio Abreu- ex canciller y ex ministro de Industrias y uno de los arquitectos del Mercosur- enfatiza en un "crecimiento con justicia" en el entendido que "sin crecimiento económico no habrá trabajo ni desarrollo humano". (AP)

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