Un empleado murió al estallar un depósito de explosivos en Córdoba

La detonación arrojó a la víctima a 70 metros y dejó un cráter de 10 metros de profundidad por 8 de diámetro

Un hombre murió ayer tras una fuerte explosión producida en un depósito de explosivos situado a 35 kilómetros al sur de la ciudad de Córdoba. La víctima, Claudio Ruggeri (35 años) que se hallaba solo manipulando explosivos en desuso, era uno de los cinco trabajadores del lugar.

El estallido, en el campo del barrio Ituzaingó -sobre 691 de la ruta 9-, arrojó el cuerpo de la víctima a unos 70 metros y dejó un cráter de unos diez metros de profundidad y ocho de diámetro.

Los conmocionados vecinos dijeron que el estruendo provocado por la explosión fue percibido hasta unos 40 kilómetros de distancia. "Vimos un hongo inmenso y la explosión fue tan fuerte que nos tiró para atrás", dijo un poblador de la zona. La humareda se elevó hasta unos cien metros, mientras en un radio de 500 metros los vidrios de las viviendas estallaron y se desprendieron colgantes y mampostería.

El depósito era una pequeña construcción de material ubicada en medio de un campo sembrado con trigo y papas, propiedad de Carlos Ferminelli, de la firma Explocor SRL, que se dedica a la explotación de canteras.

Ferminelli, quien admitió que en el establecimiento se hallaban explosivos de uso civil, sufrió una crisis nerviosa al enterarse de la tragedia. El empresario también tiene canteras en la provincia de San Luis y desde hace diez años se dedica a comercializar los detonantes. Su cuñada, que vive a 300 metros de la cantera, explicó que hace años que tiene ese depósito y que está autorizado

El comisario mayor Miguel Martínez, de la Brigada de Explosivos de la policía cordobesa, indicó que la detonación fue producida por "gelamón, un explosivo de uso civil".

Los bomberos y los agentes trasladaron por precaución unos 500 kilogramos de otros explosivos hacia otros destinos, para su destrucción.

En el caso "interviene el juzgado Federal Nº 1 de Córdoba a cargo de Bustos Fierro que en principio caratuló el hecho como muerte dudosa".

El polvorín estaba habilitado por el Registro Nacional de Armas (Renar), dijo el director del organismo, Juan Carlos Ramos. Pero aclaró que la autorización provenía de Fabricaciones Militares (FM).

El lugar había sido clausurado hace ocho años, pero se reabrió poco tiempo atrás. Contaba con habilitación de Fabricaciones Militares desde el año 1999, pero estaba en la mira de las autoridades del Renar ya que la habilitación de Fabricaciones Militares vencía el 2 de diciembre próximo y fuentes del registro aseguraron que iba a ser objeto de verificación una vez que concluyera ese plazo.

El organismo dependiente del Ministerio de Defensa ratificó que Explocor estaba inscripta como vendedor de explosivos y que fue habilitada por FM.

En la provincia de Córdoba fueron clausuradas en el último mes varias instalaciones que contaban con depósitos de explosivos que no reunían las condiciones de seguridad necesarias, como unas caleras en Santa Rosa de Calamuchita, a fines de septiembre pasado.

En este sentido, fuentes del Renar dijeron que en lo que va del año llevan clausurados más de 40 depósitos que oportunamente habían sido habilitados por Fabricaciones Militares y que Explocor era una de las firmas "que estaba por ser inspeccionada". (Télam y DyN)

El estallido se produjo en la firma Explocor, al sur de la ciudad de Córdoba.