 | lunes, 18 de octubre de 2004 | Colón lo bajó a Boca Con autoridad y con momentos de buen fútbol, Colón derrotó anoche a un inexpresivo y desconcertante Boca Juniors que volvió a perder de visitante, en la ocasión 1-0.
Ismael Blanco, a los 28 minutos del segundo tiempo, fue el autor del gol que resultó irreversible en un partido cerrado, ardorosamente jugado, sin espacios y con poco vuelo futbolístico.
Había dos alternativas para desnivelar el marcador: una genialidad de los atacantes o un error de los defensores y Colón capitalizó la segunda alternativa.
Un cabezazo deficiente de Rolando Schiavi permitió la escapada decisiva de Blanco. El gol representó un golpe de nocaut para un Boca más enjundioso que claro.
En el primer tiempo los dos equipos insinuaron más de lo que efectivamente mostraron. Por entonces el dominio fue alternado, de ninguna manera sostenido.
Tuvo su chance Colón a los 11', porque un cabezazo de Esteban Fuertes terminó con la pelota en la base del poste derecho.
Boca dispuso de una oportunidad a los 14, producto de una jugada fortuita, porque un centro superó a Alcides Píccoli y Martín Palermo y Diego Cagna remató de media vuelta, pero forzado, y atajó Tombolini.
El resto del primer período se repartió entre intentos de uno y de otro por generar riesgo en el área rival.
Colón cuando llegó con juego asociado vía Giovanni Hernández, Freddy Grisales, Ariel Garcé y Darío Gandín descubrió grietas defensiva de Boca y desnudó la lentitud de sus mediocampistas.
Boca tuvo una circulación de pelota interesante, pero finalizó sus avances con pases largos en procura de Palermo, quien siempre fue marcado correctamente.
En la segunda parte comenzó mejor Boca, con más decisión, y lo obligó a Colón a retroceder hasta sus propios dominios.
En ese pasaje fueron importantes Carlos Tevez, Neri Cardozo y Pablo Ledesma y en el cuarto de hora inicial se generaron tres situaciones propicias para convertir.
Pareció que el cotejo se volcaba en favor de los dirigidos por Brindisi, pero fueron incapaces de sostener el control de la situación.
Boca siguió con la pelota en su poder, pero Colón se abroqueló atrás, rechazó todos los centros y aprovechó los espacios que quedaron a las espaldas de los volantes visitantes.
La sorpresa sobrevino a los 28. Hubo un saque largo, Schiavi intentó un despeje, pero habilitó a Blanco, quien ingresó solo y venció a Abbondanzieri que salió apurado intento achicar.
Las últimos dos jugadas de cierto riesgo fueron simbólicas. Un remate de Cascini desde 30 metros que resultó desviado y un centro de Matías Donnet que buscó un cabezazo salvador.
Colón concluyó con una mejor imagen, que contrastó con la impotencia de Boca. (DyN) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Schiavi le gana en el salto a Fuertes. | | |