Cumplió la promesa de estar bien arriba

Omar Lavallen

Tiempo atrás, Sebastián

Porto aseguró que cuando tuviera a su disposición una moto competitiva podría demostrar su capacidad y pelear por un título en el competitivo mundo del Continental Circus.

Este domingo 17 de octubre de 2004 Sebastián Porto cumplió lo que

prometió en aquel entonces,

a pesar de que con la

victoria conseguida en Australia no pudo evitar que el español Daniel Pedrosa se consagrase campeón mundial de manera anticipada.

Lo más importante que habrá que decir es que

Porto vivió en este 2004 la mejor temporada de su carrera deportiva, que en ella tuvo, salvo en un par de ocasiones, una moto potencialmente ganadora

que él supo aprovechar

para desarrollar toda su capacidad como piloto, y si el título no fue a parar a sus manos fue porque en el camino se cruzó con un verdadero fenómeno del motociclismo: Dani Pedrosa.

A partir del Gran Premio de Inglaterra Porto y Pedrosa mantuvieron un duelo espectacular. El español

puso el talento, Porto el

coraje y la inteligencia, y así, con sus distintas características, ambos concentraron la atención de todos, porque lo que parecía hasta después del Gran Premio de Brasil una sencilla consagración de Pedrosa, se convirtió pelea de dos.

Y ese convencimiento

de Porto de meterse en la lucha por el título, cuando todo parecía estar perdido a causa de la perfección que mostraba Pedrosa en cada carrera, fue otra de las características que habrá que rescatar del rafaelino.

Sebastián Porto le dio ayer al motociclismo argentino su momento de gloria. Fue subcampeón mundial, pudo ser campeón, la diferencia entre ambos logros no es poca, pero la revancha está a la vuelta de la esquina. (DyN)