Controversia sobre si la enfermedad del ex dictador le impide ser juzgado

El general Pinochet padece deterioro mental progresivo e irreversible

Con el informe médico, el juez Juan Guzmán debe evaluar si lo procesa por violaciones a los derechos humanos

Santiago. - Un perito médico confirmó ayer un mal neurológico llamado demencia subcortical al ex dictador Augusto Pinochet y reabrió la controversia entre su defensa y sus acusadores sobre si esta enfermedad le impide enfrentar un juicio por violaciones a los derechos humanos. El informe neurosiquiátrico del especialista Jorge Tapia, designado por el juez chileno Juan Guzmán, determinó que Pinochet "presenta una demencia del tipo subcortical vascular, de acuerdo a las clasificaciones internacionales, de grado moderado", según el texto. Ello implicaría un agravamiento de su condición mental desde 2001, cuando se le detectó una demencia subcortical "de leve a moderada", razón por la cual fue sobreseído en otro proceso.

Sin embargo sus acusadores insisten en que el tipo de daño neurológico que afecta a Pinochet no es un impedimento para procesarlo. "No hay antecedentes que permitan crear un cuadro demencial y por consiguiente, Pinochet se encuentra en perfectas condiciones de idoneidad procesal y esperamos que, en un plazo breve, Pinochet sea sujeto de proceso y sea detenido", dijo el abogado querellante Eduardo Contreras

El controvertido militar, de 88 años, fue sometido a pruebas neurológicas y mentales el pasado 30 de septiembre por tres peritos, uno designado por el juez, otro por la defensa y un tercero por los querellantes, para determinar si era capaz de defenderse y guiar a sus abogados.

Con los nuevos antecedentes, el juez deberá determinar si procesa o no a Pinochet por violaciones a los derechos humanos cometidas por la llamada Operación Cóndor, una red de coordinación de aparatos represivos de las dictaduras sudamericanas en la década de 1970.


¿Loco o sólo demente?
Los abogados del ex dictador, basados en las conclusiones de su propio especialista, sostienen que la enfermedad neurológica que sufre Pinochet, demencia subcortical, no es equivalente a la locura pero sí le impide enfrentar un juicio, pues provoca un deterioro mental progresivo e irreversible. "Este es un problema esencialmente científico-médico y por lo tanto los resultados de estos exámenes están dando exactamente cuál es la situación en que se encuentra el general Pinochet, que no puede ser objeto de un proceso criminal como sujeto pasivo", dijo Pablo Rodríguez, jefe de su defensa.

Pero los acusadores de Pinochet se afirman en la letra de la ley penal pues afirman que no está "loco o demente", la única causa válida en Chile para ser eximido de un proceso, y aseguran que está lúcido para enfrentar un juicio pues "es competente para comprender, discriminar, informar y defenderse de posibles cargos", como concluyó el perito que designaron.

"Por favor, señores. Una demencia subcortical vascular que no está asociada a problemas de la corteza cerebral, en tanto no afecta memoria, sentimientos y capacidad motora, no se le puede comparar a la demencia o locura que el código de procesamiento penal exige como para que pueda ser sobreseído", afirmó Contreras.

Guzmán dijo que aún no conoce el contenido de los informes periciales, que fueron revelados ayer a los abogados. Por lo tanto se tomará un tiempo para analizarlos, resolver dudas y definir la situación procesal del ex dictador. "Como los abogados tienen cinco días de plazo para hacer las preguntas pertinentes, yo creo que lo más conveniente sería que yo me reuniera con los peritos, conjuntamente con los abogados, para formularles todas las preguntas que han hecho los abogados y así aclarar los puntos que se estimen dudosos", dijo el juez.

Guzmán ya había procesado una vez a Pinochet por el caso denominado Caravana de la Muerte, una saga de asesinatos y secuestros cometidos por una comitiva militar días después del golpe de Estado que lo instaló en el poder en 1973.

No obstante, posteriormente el ex gobernante fue sobreseído tanto por la Corte de Apelaciones como por la Corte Suprema aduciendo que su débil estado mental le imposibilitaba enfrentar un juicio. (Reuters)

Los exámenes indicaron que Pinoche sufre demencia moderada.