Un buzón anónimo

A principios de este año, una entidad civil de Funes impulsó la instalación de un buzón donde recepcionar denuncias anónimas respecto de la venta de droga en la ciudad. Lo denominaron el "buzón de la vida" y se colocó en la comisaría 23ª. En junio pasado, con la presencia de la jueza federal Laura Cosidoy, se abrió la urna en cuestión y se encontraron 107 sobres con datos que fueron girados a la Justicia para que se investiguen.El plan arrancó en febrero cuando se repartieron en el centro funense 2.200 sobres anexados al recibo de la tasa municipal para que los contribuyentes pudieran enviar sus denuncias. El tema levantó cierta polvareda ya que no pudo evitar ser alcanzado por intereses políticos.El intendente Juvenal Rímini señaló al encontrarse los 107 sobres que se trataba de una cantidad "para tener en cuenta" aunque había que estudiar "la veracidad de las denuncias". Asimismo, deslizó que el tema de la droga en Funes no escapaba a las generales de la ley. "Esto no es el cartel de Medellín -ironizó- como se le quiso hacer creer al periodismo. Hay drogas, pero no más que en otra ciudad en la que se consuma".