El gremio sigue firme tras el segundo día de paro

Los docentes cumplieron ayer la segunda jornada del paro de 48 horas, con un acatamiento que el gremio calculó en más de un 95 por ciento y la ministra de Educación, Carola Nin, sondeó en "un 45 por ciento promedio", aunque admitió que "fue muy dispar según los lugares y se sintió con más fuerza en las ciudades grandes". Consultados sobre los dichos del gobierno, tanto el secretario general de Amsafé provincial, José María Tessa, como el de la delegación Rosario del gremio, Gustavo Teres, coincidieron en insistir con que tienen la certeza de que el gobierno está en condiciones de mejorar su oferta, y repudiaron la amenaza de hacer descuentos en los sueldos a los maestros huelguistas, a la que tildan de "extorsiva".

"No lo decimos nosotros, lo dice el mismo ministro de Hacienda de la provincia, Walter Agosto, que Santa Fe tiene un superávit previsto de 390 millones de pesos para este año. Esto significa que los recursos están, lo que se necesita es la decisión política de dar prioridad en la distribución de estos recursos a la educación, y dentro de la educación al salario docente", reflexionó Tessa.

Por su parte, Teres consideró que si se tensa la cuerda lo único que se conseguirá es "un divorcio cada vez mayor entre los docentes y el Ministerio de Educación, que tiene que pensar una propuesta alternativa".

Tessa enfatizó que el gremio está dispuesto al diálogo, pero aclaró que deberá ser para discutir "una propuesta mejor, que se acerque a la petición del gremio". Y remató: "Esta no es una cuestión de la dirigencia, acá fueron 17.400 docentes que rechazaron la propuesta del gobierno y una asamblea provincial que ratificó la medida de fuerza". La aclaración fue en obvia alusión a las declaraciones de la ministra Nin, quien acusó al gremio de no estar dispuesto a dialogar.

Tampoco se privó el dirigente de cuestionar la amenaza de descontar los días y el presentismo, a la que definió lisa y llanamente como "una extorsión".