| miércoles, 18 de agosto de 2004 | Niños que aspiran humo Los hijos de fumadores aumentan al doble el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con el tabaquismo pasivo, aun si sus padres se alejan de ellos para fumar, según revela un estudio sueco. Investigadores de la Universidad de Linkoping, en el centro de Suecia, detectaron el doble de cotinina, un químico que se crea cuando el cuerpo procesa la nicotina, en la orina de los niños cuyos padres sólo fuman en el exterior, en comparación con un grupo de hijos de no fumadores.
Para los niños cuyos padres fuman fuera de la casa pero cercanos a una ventana abierta, la exposición fue 2,4 veces más elevada, mientras que los hijos de personas que consumen cigarrillos en la cocina y en el exterior, la cifra fue tres veces más alta. En los hogares donde los padres fuman frecuentemente dentro de la casa, la exposición al humo pasivo fue 15 veces más alta que para los hijos de no fumadores.
"Podemos especular que esto sucede por el aliento del fumador, pero aún no hemos estudiado eso y, por lo tanto, no estamos seguros", dijo Anna Karin Johansson, del equipo de investigación de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Linkoping.
El estudio se realizó de abril de 2001 a enero de 2003 y analizó muestras de orina de 366 niños con al menos un padre fumador, y de 433 cuyos padres no lo son. Todos los pequeños tenían entre dos y medio y tres años. enviar nota por e-mail | | |