 | lunes, 16 de agosto de 2004 | Rosarina: Pablo VI y Botafogo, a mano Jugaron todas sus fichas a ganador en un partido muy intenso y con polémicas Juan Iturrez / La Capital No por nada pelean por la punta y, más que nada, por el ascenso al círculo superior del fútbol de la Rosarina. Pablo VI (4º, 32 puntos) y Botafogo (líder, 39) brindaron un gran espectáculo, aún con errores, y dejaron en vilo el resultado hasta el mismo final que tuvo de todo. Empataron 1 a 1 y al equipo de Baigorria le sirvió para seguir arriba, mientras que los canarios no pudieron aprovechar al rival justo para descontarle puntos, más cuando jugaba en casa.
El choque fue de adrenalina pura y el final ni qué hablar, con un gol mal anulado por Müller, cuando un centro de Cardillo rebotó en Sabilán y habilitó a Saavedra, quien la mandó a la red. Pero el juez no vio ese toque del hombre de Botafogo y creyó que era pase directo. Ya estaban en descuento y hubiera significado el triunfo local, pero el empate estuvo bien.
Botafogo aprovechó las ofertas en un primer tiempo donde hubo varias situaciones. Scarano se dejó robar una pelota en defensa por Santollo, quien ante la salida de Rinaldi tocó para la entrada solitaria de Mansilla. Iban 33' y el líder se ponía en ventaja después que ambos tuvieran situaciones, como la pelota que Díaz le contuvo a Saavedra en el local y la que Rinaldi le sacó al dubitativo Maxi Gutiérrez.
Tras la conquista, los naranjas se tranquilizaron y se agigantó la figura de Zerda, quien manejó los hilos de su equipo, pero después que Pablo VI asimiló el golpe fue en busca del empate que tardó mucho en llegar. Tanto, que en el medio hubo dos penales y tres expulsiones.
A los 19' Cena lo tomó en el área a Del Valle y se ganó la roja por protestar, pero Nico Díaz lo indultó conteniendo el débil disparo de Scarano.
Un rato después, otra vez lo agarraron a Del Valle pero Müller hizo seguir. El delantero local protestó y también vio la roja.
Las cosas se le ponían peor a Pablo VI, ya que a los 34' Müller vio penal a Zedra. Botafogo tenía la posibilidad de asegurar el triunfo pero cometió dos pecados. Rinaldi se lo atajó muy bien a Santollo y antes de la ejecución insólitamente el defensor Gómez se fue de boca con el juez y se fue a los vestuarios.
Con 9 hombres y esa chance desperdiciada, Pablo VI tomó aire de nuevo y llegó el desahogo en una jugada también polémica, ya que Cardillo picó en una posición dudosa y sometió a Díaz. Al sacar del medio Maxi Gutiérrez protestó y dejó a Bota con ocho, pero así todo casi hace el segundo cuando Fleitas cabeceó afuera sobre la hora.
En el descuento llegó la polémica final relatada al principio y la bronca de Pablo VI. Igual, el reparto estuvo bien. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Canarios y naranjas mostraron porque luchan arriba. | | |