Cine / Crítica

Los cuatro estrenos de cine en la mira de Escenario

El filme francés "La piscina"; el drama brasileño "Madame Satá"; la película de terror "El enviado", con Robert De Niro; y la comedia dramática "La vida secreta de un dentista"; los cuatro estrenos de esta semana en los cines de Rosario en la mira de Escenario.


"La piscina"
Calificación: 4 estrellas. Intérpretes: Charlotte Rampling y Ludivine Sagnier. Dirección: François Ozon. Género: suspenso. Duración: 105 minutos. Salas: Monumental, Siglo y Village.

Una escritora de novelas policiales de gesto amargado y una sensual chica sin prejuicios se ven obligadas a convivir en una casa de vacaciones. La novelista quiere estar sola y avanzar en su trabajo. La joven desea descansar, disfrutar de encuentros sexuales ocasionales y charlar con la escritora.

La convivencia se transforma en un duelo donde la novelista, en un papel sin desperdicio de Rampling, mostrará algunos de sus rasgos más oscuros. Sus celos de la joven se mezclan o se disfrazan con el desprecio por las costumbres liberales de la chica. Ozon sigue sin énfasis la batalla, que tomará un giro inesperado.

"La piscina" es una bien sincronizada película de suspenso. Se sale de los lugares comunes y conecta quizá con el universo de Patricia Highsmith, con una descensos a las zonas oscuras de la naturaleza humana. Además, brinda otro rasgo del virtuosismo de Ozon, quien al parecer se ha propuesto cambiar de estilo con cada nueva película, aunque en el fondo siga presente su misma inteligencia. F.T.


"Madame Satá"
Calificación: 3 estrellas. Intérpretes: Lázaro Ramos, Flavio Bauraqui y Marcelia Cartaxo. Dirección: Karim Ainouz. Género: drama. Duración: 105 minutos. Sala: Del Siglo.

Premiada en varios festivales, la película es, en primer lugar, el relato de un sueño hecho realidad: el de Joao Francisco dos Santos, quien traspasó las barreras que la sociedad hipócrita impone a los diferentes y se convirtió, a fuerza de coraje, en una figura central del carnaval de Río de Janeiro de los años 40. "Madame Satá" -apodo que el protagonista de esta historia tomó del filme de Cecil B. DeMille "Madame Satán"- se basa en la historia real de un marginal negro y homosexual que se ganó el respeto de sus iguales tras sufrir diez años de cárcel y muchísimos más de exclusión social, pobreza y toda clase de humillaciones.

Además de su valor humano, la película exhibe un cuidadoso trabajo de la imagen y la fotografía, preciosista, es cierto, pero muy efectivo -sobre todo gracias al poder de sus colores y a los fuera de foco- a la hora de generar sensaciones y acompañar el estado de ánimo de los personajes. P.P.


"Rey Arturo"
Calificación: 3 estrellas. Intérpretes: Clive Owen y Keira Knightley. Dirección: Antoine Fuqua. Género: aventuras. Duración: 120 minutos. Salas: Monumental y Village.

El intento de mostrar al "verdadero" Arturo es, en cierta medida, engañoso pero ello no le resta demasiada efectividad a la película, que cumple con ser un interesante entretenimiento. Más allá de todos los ingredientes trillados, "Rey Arturo" se ubica en un lugar que le permite un pequeño destello de diferencia. El filme muestra, es cierto que a los apurones, cómo se forja la conciencia de un héroe, de qué manera un guerrero ético se da cuenta de que sus acciones pueden tener un destino diferente al de la mera obediencia. En la misma sintonía, la película juega también con la idea de patria, instala la pregunta de cuál es la patria de un hombre: ¿aquella en la que vive o aquella con la sueña? El engaño en mostrar al "verdadero" Arturo es simple: la película dice que va retratar al personaje histórico pero su relato se termina transformando en una nueva mitología, con momentos tan seductores como los del mito que pretendía derogar. La ficción llama a la ficción, y eso salva al filme y mantiene atento al espectador hasta el final.

Del elenco actoral se destaca Keira Knightley. La pantalla se ilumina con la joven actriz de "La maldición del Perla Negra" y "Realmente amor". Clive Owen como Arturo es más dudoso. A veces le pesa el personaje, como un desafío muy grande. El resto cumple sin desentonar.

Una de las sorpresas de la historia es mostrar a Arturo como creyente católico. Ese punto se transforma en un centro de conflictos y sirve de base para medir la decisión del guerrero de convertirse en rey de una nación, en alianza con fuerzas que le habían sido enemigas. En resumen, un filme que hace revisionismo, claro que al estilo Hollywood. F.T.


"El enviado"
Calificación: 2 estrellas. Intérpretes: Robert De Niro, Greg Kinnear y Rebeca Romijn-Stamos. Género: terror. Duración: 102 minutos. Dirección: Nick Hamm. Salas: Monumental, Siglo y Village.

Una pareja pierde en un infortunado accidente a su único hijo. El dolor que les provoca la muerte los lleva a aceptar tomar parte de un siniestro experimento de clonación. A partir de una célula conciben una réplica del niño muerto. La alegría vuelve a la familia, pero no por mucho tiempo. Poco a poco los padres advierten que el comportamiento de su hijo está lejos de ser normal y empieza preocuparse. Y bien que lo hacen porque el pequeño no es ni por asomo lo que esperaban. Inscripta en el subgénero de terror que inauguraron películas como "La profecía" y "El ángel malvado", "El enviado" vuelve a encarnar la maldad en un chico. Con un relato clásico, la realización de Nick Hamm pone el acento en los enigmas y climas opresivos para provocar el miedo. Sin embargo, es la mirada perdida de Cameron Brigh, el niño actor que debutó en "El efecto mariposa", lo más inquietante del filme. Sus ojos celestes son helados como la muerte que la ciencia se encuentra empeñada en vencer. R.L.


"La vida secreta de un dentista"
Calificación: 2 estrellas. Intérpretes: Campbell Scott, Hope Davis y Denis Leary. Dirección: Alan Rudolph. Género: comedia dramática. Duración: 98 minutos. Salas: Del Patio y Village.

Compartir un hogar con una pareja es de por sí un tema complicado, y mucho más cuando ambos tienen la misma profesión y encierran personalidades muy diferentes. Eso les sucede a Dave (Campbell Scott) y Dana (Hope Davis), un matrimonio de dentistas, con tres hijas y un buen pasar económico pero con tormentas de puertas para adentro. El director Alan Rudolph intentó hacer una parodia de la rutina de la vida en pareja y jugó con la ambigüedad de una trama donde conviven situaciones dramáticas con la comedia. La crisis se desatará cuando Dave descubre a su esposa en una situación no muy clara con un compañero de coro, y sospecha que ella lo engaña. A partir de allí, sus alucinaciones superan lo previsible. En esto mucho tiene que ver Slater, un insoportable paciente (Denis Leary), quien se convierte en su álter ego. La película tiene buena dinámica hasta la mitad, pero después cae en un pozo, pierde sorpresa y, lo que es peor, llega a un desenlace tan abierto que no cierra la historia. P.S.