SEGURIDAD

La importancia de los cristales de un vehículo

Los cristales de un vehículo son piezas muy importantes y cuya tecnología ha ido cobrando mayor relieve por varias razones: tienen funciones estructurales que operan con el resto de la carrocería, en caso de accidente no deben causar lesiones a los pasajeros, y además deben poseer capacidades de aislamiento térmico para el confort de los ocupantes y el ahorro de energía.

Un informe realizado por el Centro de Experimentación y Seguridad Vial Argentina (Cesvi) remarca que a través de las impresiones visuales el conductor recibe el 90% de la información necesaria para el manejo, por lo que cuanto mayor sea la visión panorámica que ofrezca un vehículo, más amplio será el campo de información.

El informe resume las características más notorias de los cristales actuales:

u Formas y diseños: el parabrisas fundamentalmente, pero todos los cristales también, están asociados directamente al rendimiento aerodinámico del auto. Estos conceptos comenzaron a ser notorios cuando se pasó de los cristales planos a un esquema conformado por dos hojas que le daban un efecto curvo, y ya en 1934 Chrysler lanza el primer parabrisas curvo.

u Tipos de cristales: según sus características constructivas se pueden clasificar en templados y laminados. Los templados se obtienen por endurecimiento y eso se logra calentando el cristal a altas temperaturas y luego enfriándolo con chorros de aire. Así, la superficie se enfría y contrae antes que su interior, aumentando su capacidad para resistir esfuerzos. Además, en caso de rotura, se fragmentará en pequeños pedacitos que reduce el grado de las posibles lesiones.

Los laminados, en cambio, están compuestos por dos o más láminas de cristal pegadas a una película de material plástico (polivinil butiral) dotado de un alto índice de elasticidad. Este tipo de construcción permite que ante la rotura del cristal las partes queden adheridas entre sí, evitando posibles cortes a los ocupantes del vehículo.

La resistencia del polivinil butiral es notable y se puede observar en los crash test de alta velocidad en donde los dummies sin el cinturón de seguridad son retenidos dentro del habitáculo por esta película, pese a que el parabrisas se rompe en su totalidad. Que quede claro que debe usarse el cinturón de seguridad para evitar lesiones ya que el dummie es un muñeco y los pasajeros son personas de carne y hueso.

Además, los laminados permiten mantener la visibilidad tras la rotura ya que no se produce el astillado como en los templados. Otra ventaja de los laminados es que la película plástica reduce la entrada de rayos ultravioleta y así atenúa la decoloración de los objetos.

Por estos motivos de seguridad, los parabrisas laminados fueron reemplazando a los templados, y actualmente la ley de tránsito prohíbe la fabricación e instalación de los templados.

u El tamaño de los cristales: con el correr de los años la superficie cubierta por cristales le ha ido ganando espacio a la chapa. La idea en muchos diseños es aumentar la interrelación de los pasajeros con el exterior. Eso se ve en mucho prototipos y también en autos que están en la calle. En muchos, además de los amplios parabrisas y ventanas, se acristala buena parte del techo como ocurre en el Peugeot 307 SW o el BMW X3, por citar dos ejemplos.

Como para comparar, la superficie acristalada del Peugeot 206 es de 2,96 metros cuadrados, de los cuales 1,2 corresponden al parabrisas. Su antecesor, el Peugeot 205, tenía 1,9 metro total y 0,7 de parabrisas.

u La función estructural de los cristales: el cambio más importante desde el punto de vista de la estructura de la carrocería es el abandono de los cristales calzados por los pegados.

Los calzados se unen a la carrocería por medio de un burlete de goma que se ubica entre el cristal y la chapa, mientras que el pegado va unido por medio de un cordón de material adhesivo de poliuretano.

En caso de vuelco, el cristal unido por adhesivo en forma continua a la carrocería forma parte del conjunto y ayuda a disminuir la deformación del techo. Además, el hecho de que el cristal pegado aumente la rigidez del habitáculo hizo posible la reducción del grosor de los parantes.

En choques frontales a alta velocidad, los parabrisas pegados tienen la ventaja de no salir despedidos como lo hacen muchos de los calzados. Los pegados también son indispensables en vehículos equipados con airbag ya que en el momento del impacto el inflado de los airbags producen una sobrepresión dentro del habitáculo que descalzaría al cristal si no estuviese pegado.

La importancia de los cristales en los autos modernos hace que en caso de rotura deban ser reemplazados por piezas originales, de certificada calidad e instalados por personal idóneo para que tras la reparación se tengan las mismas características de seguridad que cuando el auto salió de la fábrica.