| domingo, 25 de julio de 2004 | Amia: traductor de Cancillería deberá declarar por el escandalo de los cassettes El juez federal Claudio Bonadío interrogará mañana lunes a un intérprete de la Cancillería que participó de la reunión en la que, según el titular de la Amia Abraham Kaul, el presidente Néstor Kirchner informó que habían sido recuperadas 45 grabaciones extraviadas en la causa por el atentado perpetrado en 1994 a la mutual judía.
De acuerdo con la información suministrada por fuentes judiciales, la audiencia en la que será interrogado el traductor fue fijada para mañana a las 10, y tras la diligencia Bonadío podría cursar un interrogatorio al presidente Néstor Kirchner para que aporte su versión sobre el oscuro episodio de los casetes del caso Amia.
Sucede que el 19 de julio pasado, un día después de los actos por el décimo aniversario del ataque a la Amia, Kirchner recibió en la Casa de Gobierno a Kaul, a otros dirigentes de la colectividad local y a 22 representantes del Comité Judío Argentino que llegaron al país para participar del homenaje a las 85 personas fallecidas en el atentado.
Al término del encuentro, Kaul informó en rueda de prensa que Kirchner había brindado la buena noticia sobre el hallazgo de los casetes pero al día siguiente el jefe de Estado desmintió públicamente el dato. Por eso, Bonadío citó al intérprete que ofició de traductor castellano-inglés en la reunión, en la que también desempeñó la misma función un empleado de la Amia que aún no fue citado.
El pasado viernes Kaul declaró ante Bonadío, bajo juramento, y confirmó que Kirchner comunicó el hallazgo de los casetes, que resultó falso.
Fuentes judiciales dijeron que los investigadores presumen que un funcionario del Ministerio de Justicia, basándose en información que habría sido aportada por la Side, brindó a Kirchner la noticia sobre la recuperación de los casetes.
Pero el dato resultó no ser cierto y provocó un escándalo que el ahora ex ministro de Justicia, Gustavo Beliz, definió la semana pasada como "papelón".
Menos de una semana después del todavía no esclarecido equívoco, Kirchner relevó a Beliz de su cargo.
Bonadío procura dilucidar qué sucedió en torno a los casetes porque investiga una serie de irregularidades en la investigación del atentado a la Amia que incluyen el presunto pago de 400 mil dólares, por parte del propio Estado, al detenido Carlos Telleldín, que en 1996 brindó los datos que determinaron el arresto de un grupo de policías bonaerenses actualmente sometidos a juicio oral como cómplices de la masacre. (DYN) enviar nota por e-mail | | |