| domingo, 25 de julio de 2004 | ¿Te acordás hermano?... de José Chan El centrojás de la década del 50 metió el último gol de Central Córdoba en primera Miguel Pisano / La Capital Chan, chan. Así en el tango como en la vida, el ex centrojás José Chan convirtió el último gol de Central Córdoba en primera. Por esas cosas del fútbol aquel gol de cabeza que José Chan le metió a Estudiantes de La Plata en el Gabino Sosa, cuando Córdoba ganó su penúltimo partido en la divisional mayor, fue el último hecho por un charrúa. En realidad, Córdoba también ganó el último encuentro, justamente contra Central, en la vieja cancha de Arroyito, pero el gol se lo hizo el Beto Ducca en contra, en uno de esos partidos que quedaron en la historia para la interminable polémica futbolera de café. Así, casualidad o causalidad, el Petiso Chan ostenta desde hace 45 años del raro privilegio de haber metido el último gol charrúa en primera.
Quizá por eso el Petiso se agranda en una mesa contra el vidrio de la cancha de fútbol cinco de su pibe, que comparte en la extensa charla con Ovacion.
Chan vive desde hace más de 70 años en el corazón de Tablada, en la esquina de Ayacucho y Saavedra, desde que era de tierra, aunque cuando tenía 5 años empedraron con bola gruesa, en la época de la vieja estación La Bajada. Nieto de vascos franceses, hijo de José Marcelino, un pintor de brocha gorda, y de Tránsita, el Petiso aprendió el oficio del viejo pero desde pibe despuntó ese loco berretín por la redonda en los generosos huecos y campitos del barrio. "Acá era todo campo, lástima que ahora hay zonas por donde no se puede pasar. Era otra época. Estaban la cancha de La Fe, la del club El Fortín, de Ayolas y Colón; del club Colegiales de 1º de Mayo y Saavedra; La Aurora de Necochea y Dean Funes. La pucha... en La Aurora había que jugar. Estábamos todo el día con la pelota, aprendíamos a jugar en la calle y después íbamos a Central Córdoba", recuerda el Petiso sus comienzos con la redonda, en el legendario La Aurora y en Colegiales, en torneos de 5 en cancha de básquet.
"O trabajás o estudiás. Te venís a trabajar conmigo o te vas a estudiar. Yo vagos no mantengo", le advirtió el Vasco a los 13 años, cuando Chan se fue a probar a la quinta de Central Córdoba. "Yo era figurita en los torneos de 5 y muy amigo de Ramacciotti, que después fue a Newell's, y de Dante Alvarez, con el que nos criamos juntos porque él vivía en Ayacucho y Uriburu", pinta el Petiso sus inicios.
En realidad, cuando Chan llegó a Córdoba a jugar de 5 no lo querían porque era muy chiquito, entonces lo corrieron a la izquierda. "Era medio chicuelo. Me preguntaron si me animaba a correrme un poquito al costado, y siempre que fuera en el mediocampo me gustaba", cuenta su llegada al club de Tablada.
Con el Cabezón Alvarez salieron campeones en todas las divisiones inferiores de Córdoba. "«Pocho, ¿y si le pedimos al club que nos pague?»", me preguntó un día el Cabezón, cuando teníamos 13 años. Entonces pedimos hablar con el presidente Gerardo Stremera y al tiempo nos empezaron a pagar lo que ahora serían unos 5 pesos por partido, lo que sería una entrada al cine", confía Chan sobre el comienzo de su carrera profesional. "Jugábamos en quinta, en cuarta, en primera local, donde había un partido nos llevaban al Cabezón y a mí como comodines, por si faltaba uno", historia Pocho.
En una exquisita foto sepiada del equipo de Córdoba que salió campeón de la C en el 52, el Petiso aparece como la mascota, cuando jugaba en las inferiores.
Chan debutó en la primera con 15 años en un partido en el Gabino Sosa contra Talleres de Remedios de Escalada: "Pero te hacían jugar tres partidos porque si jugabas más te tenían que hacer contrato. Yo jugué por Villagra y Dante Alvarez por Semprini. Y después volvías a la normalidad, algo que ya sabíamos".
Córdoba salió subcampeón en el 56 con aquel equipo que formaba con Palmintieri; Alvarez y Rivoiro; Valenti, Villagra y Chan; Ráccaro, Indalecio López, Cecchina, Bertrán y Delogu. Ese año Chan quedó libre por no renovar contrato y se fue a jugar a Tigre, de donde volvió en el 58. Y en el 59 hizo el último gol de Córdoba en primera: "Para tener chances de salvarnos del descenso teníamos que ganar contra Estudiantes y Central. Yo hice el último gol de Central Córdoba en primera, de cabeza contra Estudiantes, porque el gol contra Central se lo hizo Ducca en contra. Con Estudiantes había tal amistad después de la gira en Bolivia -donde murió el Bocón Basignani-, que nos decían que pateáramos y el único que quería ganarnos era el arquero suplente, que se atajó todo. Menos mal que metí el gol cuando faltaban dos minutos y casi me matan de la montaña que hicieron".
-Central también les dio una mano...
-Sí... El gol de Ducca fue una manito que nos dieron los muchachos porque éramos muy amigos de la barra de Biaggioli y Ramacciotti. Nos conocíamos de jugar en los potreros. enviar nota por e-mail | | Fotos | | 45 años no es nada. El Petiso se agranda por el último gol charrúa en primera. | | |