| domingo, 18 de julio de 2004 | La luz del peregrino en Santiago de Compostela En honor de Santiago Apóstol, Galicia festeja el primer año santo del milenio.Xacobeo 2004, una celebración entre lo mundano y lo espiritual Aurelio Alvarez / La Capital En los últimos 1.200 años se ha ido construyendo un continuo peregrinaje hacia Santiago de Compostela. Historia, espiritualidad, patrimonio artístico y, cómo no, también ocio se reúnen como ingredientes de una búsqueda del legado del apóstol, o de algo aún mejor: uno mismo. Camino de todos, es un trajinar hacia el oeste, donde muere el sol y donde la tradición celta indicaba antiguamente el sitio desde el que las almas trascendían el mundo material. Este año son todos bienvenidos a las tierras de Galicia, cuando se cumple el primer año santo del milenio.
La leyenda dice que el cuerpo de Santiago el Zebedeo, luego de su martirio en Palestina, fue trasladado por dos discípulos hasta el que sería su sepulcro definitivo, en Compostela. Con el tiempo, nobles y plebeyos, santos y pecadores, devotos y pícaros comenzaron a transitar diversas rutas que a la postre permitirían acrisolar los reinos de España.
Junto a los báculos de los primeros peregrinos, entre ellos un monje de nombre Francisco, de Asís, los reyes de Asturias ampliaron sus dominios. Y siguiendo los efectos de la reconquista territorial frente a los moros, el derrotero compostelano se afianzó por tierras seguras.
Entre los siglos doce y dieciocho el camino jacobeo alcanzó esplendor atrayendo a más de medio millón de personas en algunos años santos. Las postrimerías del siglo veinte trajeron la consolidación del fenómeno religioso y cultural, planteando para el presente año un gran desafío: superar los seis millones de visitantes. En los primeros cuatro meses de 2004 pasaron el millón. El 27 de este mes, fiesta del apóstol, habrán de dispararse seguramente las estadísticas.
Uno por seis El Camino de Santiago en realidad son seis: el Francés, con sus dos "afluentes", el aragonés y el navarro; el Primitivo (o del Norte), prolongado actualmente hacia el País Vasco y Cantabria; el portugués, con salida en Lisboa; la Ruta de la Plata, que parte de Mérida, herencia de las calzadas romanas, el inglés (vía marítima) y el de Arousa (vía marítima).
Como dato destacado de esta pluralidad de vías surge la diversidad natural y la recuperación de la infraestructura del Camino en las últimas décadas cabalga sobre dicha cualidad. Turismo rural y de aventura, náutico y termal, sostienen la oferta. Además del tradicional atractivo gastronómico gallego, se ha puesto especial empeño en la restauración de iglesias, castillos, albergues, ermitas y monasterios, muchos de los cuales integran la red de paradores como hotelería preferencial, en el marco de irrepetibles estilos arquitectónicos: el románico y el gótico.
Pero Galicia mira al mar como nadie, aseguran sus pueblos costeros, desde donde tantas veces se vio salir barcos rebosantes de emigrantes españoles. Hoy, a la pujanza pesquera se le une la navegación deportiva al más alto nivel. Tanto que el año próximo partirá desde la ría de Vigo la Volvo Ocean Race, competencia internacional que situará en sus márgenes el centro de operaciones de los equipos que tendrán en Ciudad del Cabo, Melbourne, Río de Janeiro, Baltimore y el Báltico escenarios principales de la regata.
Cifras En 2003 visitaron Galicia más de 600 mil turistas (el 15 por ciento del total) provenientes desde fuera de las fronteras españolas. Primero los portugueses, seguidos de franceses, alemanes y suizos. Para el 2004 los cálculos aseguran que en total superarán los seis millones, que reportarán unos 3.600 millones de euros en ingresos, es decir, el 12 por ciento del PBI gallego. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El Camino de Santiago combina historia, espiritualidad y patrimonio arquitectónico. Este año los viajeros son bienvenidos a Galicia; se cumple el primer año santo del nuevo milenio. | | |