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 miércoles, 30 de junio de 2004

Un polémico proyecto limita a los extranjeros abrir negocios en Rosario
Es del presidente del Concejo, Agustín Rossi, y obliga a que los inmigrantes tengan la residencia definitiva

Pablo R. Procopio / La Capital

Los extranjeros que tengan una residencia precaria en el país no podrán tramitar la habilitación de un comercio en Rosario, si prospera un polémico proyecto presentado por el presidente del Concejo Municipal, Agustín Rossi. En todo caso, sólo tendrán la posibilidad de ser titulares de una firma comercial quienes hayan obtenido la residencia definitiva. Esta iniciativa fue cuestionada por especialistas del derecho, quienes la tildaron de "dudosa constitucionalidad" y hasta se atrevieron a presentarla como "discriminatoria" para los inmigrantes (ver aparte). Sin embargo, el jefe del Palacio Vasallo sostuvo que hay que "quitarle dramatismo" a la situación.

Si bien la propuesta no especifica nacionalidades, podría relacionársela con la radicación de supermercados de propietarios asiáticos a quienes los comerciantes locales los acusaron de ser "competencia desleal".

El proyecto se conoció justo cuando el presidente Néstor Kirchner se encuentra en gira oficial por China en busca de aliarla como socia comercial.

La radicación provisoria es el paso previo a la definitiva que, según Rossi, "se entrega después de no mucho más de 90 días", tras la tramitación de la primera. En ese lapso, el solicitante debe presentar toda la documentación requerida por las autoridades migratorias argentinas. Si no lo hace, puede que no sea aceptado como residente.

El edil kirchnerista justificó su propuesta al señalar que "con la residencia precaria, cualquier inmigrante puede desarrollar varias tareas, como trabajar, estudiar y demás", aunque con la nueva ordenanza "(el foráneo) no podrá ser titular de una licencia para explotar un comercio o industria".

-¿Por qué?

-Las habilitaciones que otorga la Municipalidad de Rosario duran cinco años, es decir que el municipio podría estar dándole una autorización a alguien que quizás a los pocos días de solicitar la residencia provisoria se tenga que ir del país porque no reunió la documentación requerida, o el Estado nacional decidió no otorgarle la residencia definitiva. Esto no significa que el extranjero no pueda trabajar.

Otro de los argumentos de Rossi se basa en que contar con el DNI u otro documento de identidad es uno de los requisitos para obtener una habilitación comercial, que -en el caso de los inmigrantes- son otorgados con la residencia definitiva.

"En 2001, la Dirección de Asuntos Jurídicos municipal aconsejó revocar un permiso de habilitación de un inmigrante con residencia provisoria, por lo que ahora esta ordenanza está cubriendo un vacío legal", manifestó el concejal.

-¿No cree que esto contradice la legislación nacional?

-Para nada, porque lo que las leyes dicen claramente es que cualquier inmigrante tiene derecho a trabajar, mientras que acá sólo se está limitando una responsabilidad del Estado municipal. Yo no le limito el derecho a trabajar a nadie, sólo le digo (al extranjero) que si no tiene el documento no puede abrir un comercio. Además, en el ámbito de la Intendencia no existen las habilitaciones precarias, por lo que se le podría estar dando una autorización por cinco años a quien quizás después deba irse del país.

-El caso de 2001 que usted menciona tuvo como protagonista a un inmigrante de origen asiático, ¿en el fondo, esta ordenanza apunta a ellos?

-No, es una norma de carácter general. Sí es cierto es que últimamente se han recibido reclamos en torno a los extranjeros de ese origen. Acá se trata de poner en igualdad de condiciones a los inmigrantes con el resto de los ciudadanos rosarinos.

En este sentido, dijo que "hay rosarinos que quieren abrir un negocio y no pueden porque tienen deudas o faltas. ¿Por qué no vamos a tomar recaudos con los del exterior?", se preguntó.

Las disputas entre supermercadistas rosarinos y chinos llegaron al punto de que a mediados del año pasado hubo agresiones contra los comercios de origen oriental. Incluso, se tiraron bombas de estruendo.

Pasadas las 15.30 de ayer, un grupo de almaceneros se reunió con jefe del Palacio Vasallo y otros concejales en la Asociación Empresaria, donde se debatió el tema. En tanto, Rossi se ocupó de destacar que "el proyecto fue presentado hace quince días". Cosechó la firma de la mayoría de los bloques, excepto de la bancada oficialista y de los ediles Gustavo Gerosa y Alberto Cortés.

En efecto, el presidente del bloque socialista, Miguel Zamarini, consideró que "una cosa es que se preocupen por la competencia desleal en la faz comercial, y otra es generar el fantasma de la discriminación".

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Se teme que tras el proyecto en debate se esconda una actitud discriminatoria.

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