Una traza ferroviaria para cambiarle la cara a la región

El incremento de las operaciones en las terminales portuarias en la región metropolitana de Rosario produjo un aumento en los transportes terrestres. Sólo el ferrocarril alcanzó los 6,4 millones de toneladas. Para poder responder correctamente a la demanda de transporte el Instituto de Estudios de Transporte (IET) propone modificar la estructura física de los ramales e instalaciones ferroviarias y por sobre esas obras plantea un nuevo trazado de vías: el circunvalar.

El trazado tendrá una longitud de 88 km, será paralelo a la ruta AO12, doble vía mixta desde Alvear, con acceso a playa Villa Diego y Puerto Sur Rosario, hasta Ricardone, se accede mediante un ramal a estación San Lorenzo y por un segundo ramal se accede por zona norte de Puerto San Martín a estación Cerana.

Con esta propuesta se podrán utilizar trenes largos pesados, formaciones de hasta 120 vagones, para lo cual se preven tres playas de maniobras para reformar trenes ubicadas en Ricardone, Roldán y La Carolina. Asimismo se propone la radicación de Zonas de Actividades Logísticas (ZAL) de asistencia de cargas.

Las mejoras para la red ferroviaria existente se plantearon en tres grupos de obras, uno para la zona sur, uno para la zona centro y otro para la zona norte. Las soluciones encontradas por el IET responden a la variada gama de problemas que van desde los vinculados con la capacidad de los trazados ferroviarios de la región metropolitana de Rosario, pasando por interferencias urbanas, impactos sobre el medioambiente, condiciones de seguridad en las intersecciones entre el medio vial y ferroviario, hasta las mejoras relacionadas con las operaciones de cargas.

En la zona norte se plantearon obras para incrementar la capacidad de los ramales como así también aumentar la eficiencia de las operaciones de los patios de maniobra.

En la zona centro, que corresponde a Rosario, las obras se relacionan fundamentalmente con los patios de maniobras, las que incluyen racionalización de las parrillas de vías. También obras de nuevos trazados como las curvas ubicadas en Cabín 8.

En la zona sur, debido al escaso número de terminales portuarias que se encuentran en el sector y a que todos los ramales existentes en la zona cuentan con doble vía, no se observaron problemas relacionados directamente con insuficiencias de capacidad. Sí, se plantearon obras relacionadas con los aspectos urbanos ambientales y con la seguridad ferrovial.