Conflicto. El Comité de Descolonización de Naciones Unidas pidió que Argentina y Gran bretaña se sienten a negociar

Reclamo de Bielsa en la ONU por la soberanía de Malvinas

El canciller volvió a rechazar el principio de autodeterminación que proponen los habitantes de las islas

El Comité de Descolonización de las Naciones Unidas pidió ayer a la Argentina y Gran Bretaña que reanuden las negociaciones por la soberanía sobre las islas Malvinas luego de una reunión donde, una vez más, la autodeterminación de los kelpers estuvo en el centro del debate.

El pronunciamiento del Comité, presentado por diversos países latinoamericanos, fue aprobado por consenso.

Previamente, en su segunda comparencia ante el Comité, el canciller argentino, Rafael Bielsa, había reclamado esa decisión "para poner fin a la situación de colonia" del archipiélago y volvió a rechazar el principio de autodeterminación que proponen los isleños.

"Sostener que los habitantes de las islas tienen el derecho a la autodeterminación los erigiría en árbitros de una disputa territorial de la cual el país que los ha implantado es parte", señaló Bielsa, "es decir, el poder colonial convalidaría su propia usurpación y se convalidaría a sí mismo".

Las Malvinas fueron ocupadas por Gran Bretaña hace 170 años, expulsaron al gobernador José Vernet y a partir de ese momento se estableció una población inglesa que excluyó a los pobladores argentinos.

Buenos Aires nunca renunció a la lucha por recuperar la soberanía sobre ese territorio. En abril de 1982, la entonces dictadura militar intentó perpetuarse en el poder con una acción bélica sobre el archipiélago que desencadenó la guerra del Atlántico Sur que duró 74 días hasta la rendición de las tropas nacionales.

En su discurso ante el Comité de Descolonización en Nueva York, Bielsa recordó que "la vulneración mediante una acción imperialista decimonónica de la soberanía e integridad territorial de una república independiente, la Argentina, reconocida por la propia Gran Bretaña, hace prevalecer el principio de integridad territorial por sobre el de libre determinación".


Decisiones "inadmisibles"
El ministro calificó de "inadmisibles las decisiones unilaterales" que se han adoptado en las islas, tal el caso de las licencias pesqueras y petroleras.

En este marco, el canciller historió sobre la "usurpación" por parte de Gran Bretaña del territorio insular y reiteró que las negociaciones entre ambos gobiernos son la "única forma de poner fin a la situación colonial", además de exhortar al Reino Unido a responder los "reiterados llamamientos de la comunidad internacional" acerca de la reanudación de las negociaciones entre ambos gobiernos por la soberanía de las islas.

Bielsa enfatizó que "todos los argentinos estamos firmemente comprometidos en la solución pacífica de esta disputa" y recordó que en su discurso de apertura de sesiones del Congreso, el presidente Néstor Kirchner había destacado que el reclamo soberano sobre las islas "forma parte de los intereses nacionales e integra el conjunto de políticas de Estado que todos debemos defender".

El canciller ratificó una vez más "la permanente voluntad del gobierno argentino por alcanzar una solución justa, pacífica y definitiva a este problema, que es una prioridad de la política exterior de mi país", dijo.

Seguidamente advirtió que la administración Kirchner "considera inadmisibles las acciones unilaterales británicas en el área disputada", entre las que mencionó la política de pesca, la adjudicación de licencias para la exploración y explotación de minerales, la exclusión de la Argentina continental de los contactos y comunicaciones directas con las islas y la renuencia británica a avanzar en las medidas de confianza en el ámbito militar, entre otras cuestiones.

No obstante, el canciller reafirmó que el gobierno "continúa dispuesto a trabajar" para lograr un entendimiento con el Reino Unido "bajo fórmula de reserva de soberanía" y recordó la propuesta de restablecer los servicios aéreos regulares directos entre el territorio continental argentino y las islas, operados por empresas nacionales.

Los isleños estuvieron representados por los consejeros Roger Edwards y Mike Summers, mientras que el gobierno británico mantuvo su tradicional postura de no enviar delegados al denominado Comité de los 24.

La resolución que votó el Comité de Descolonización tiene carácter no vinculante, y año tras año se vota por unanimidad desde 1984.

La nueva reunión del Comité de los 24 se realiza una semana después de que el gobierno de Kirchner otorgara un permiso especial a la empresa Aerolíneas Argentinas para que inicie dos vuelos directos semanales entre Buenos Aires y Puerto Argentino.

Pocos días antes, el gobierno argentino había acordado el mismo derecho a la aerolínea estatal Lafsa.

Los isleños rechazan la perspectiva de vuelos programados regularmente con Argentina porque entienden que constituye "una amenaza velada a la soberanía británica".

Bielsa llamó a "poner fin a la situación de colonia".