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 miércoles, 16 de junio de 2004

De 92 torres que ahora quedan en Rosario, sólo tres funcionan respetando la normativa vigente
La Municipalidad desmontó 3 antenas de telefonía móvil
El municipio quiere reordenar el sistema sin afectar la calidad del servicio. Reuniones con las empresas

Eugenia Langone / La Capital

Tres antenas de telefonía móvil quedaron ayer fuera de servicio luego de que la Municipalidad cumpliera la orden judicial de desmantelarlas. Así, a media mañana fueron desconectadas las estructuras de este tipo que se levantaban en Río de Janeiro al 2000, de la empresa Unifón; Italia al 4500, de CTI Móvil; y Castellanos al 2300, de la firma Movicom. Ninguna tenía la habilitación municipal correspondiente, y en esta condición aún quedan en Rosario 92 antenas. Si bien existen unos diez fallos de la Justicia que le permitirían a la Municipalidad avanzar sobre otras torres, los funcionarios explicaron que "es necesario esperar que se libren las órdenes de allanamiento necesarias para ingresar a los terrenos donde se encuentran que son propiedad privada".

El secretario de Gobierno de la Municipalidad, Juan Carlos Zabalza, explicó que "en los tres casos se trató de resoluciones sobre presentaciones judiciales realizadas por los vecinos de diferentes barrios y ordenaban al municipio el desmonte de las antenas". Aunque en realidad lo que se hizo fue proceder a la desconexión de las torres, es decir, quitar los cables y los transmisores para impedir su funcionamiento.

En cuanto al futuro, Zabalza es optimista. "Ahora se agilizarán los desmantelamientos porque el Concejo Municipal autorizó a la Municipalidad a contratar en forma directa a las empresas encargadas de hacer este trabajo, mientras que antes había que realizarlo a través de una licitación pública y no se podía cumplir con los plazos judiciales", dijo.

El conflicto con las antenas de telefonía se desató a fines de noviembre de 2000, cuando la estructura de 120 metros que la empresa Movicom tenía en el Club Banco Nación (Rondeau al 2900) se desplomó y le causó la muerte a un operario. Dos días después del accidente, el Concejo Municipal endureció las normativas para la instalación de estas torres.

Así, la nueva ordenanza prohibió instalar estas estructuras en clubles, parroquias, escuelas y espacios de concurrencia masiva, y estableció también que no pueden tener una altura superior a los límites de los predios linderos. Pero hasta ahora las empresas de telefonía móvil no se hicieron eco de los cambios.

Actualmente, hay en Rosario 27 antenas de Unifón, 4 de Telecom Personal, 12 de Nextel, 22 de Movicom, 4 de Impsat y 23 de CTI. Y, según aseguró la concejala socialista Silvia Augsburguer, "de esas 92 estructuras sólo 3 respetan la normativa".

Lo cierto es que algunas de ellas funcionan con medidas cautelares otorgadas por la Justicia. Y uno de los casos más emblemáticos es la que está ubicada en el Colegio La Salle (Mendoza y Alem), que ya provocó la preocupación de los padres de muchos alumnos que decidieron cambiar a sus hijos de colegio.


Reordenamiento
Ante esta situación que ya lleva casi cuatro años, la Municipalidad quiere poner en marcha un reordenamiento del sistema de antenas de telefonía móvil para ajustarlo a las normativas vigentes y para eso viene manteniendo reuniones periódicas con representantes de las diferentes empresas nucleados en la Cámara de Informática y Comunicaciones de la República Argentina (Cicomra).

"Por primera vez después de varios intentos frustrados notamos que hay una voluntad positiva por parte de los empresarios para reordenar el sistema. Y están dispuestos a avanzar sobre temas sensibles, como es la presencia de estas antenas en colegios y clubes", aseguró el secretario de Gobierno municipal.

Y también están dispuestos a reemplazar las viejas antenas con tensores emplazadas en los edificios por "tecnología más moderna", indicó Zabalza.

Pero lo más importante para el funcionario es "lograr que las empresas cumplan con la normativa y que a la vez el sistema de telefonía móvil en la ciudad funcione correctamente". Es más, Zabalza reconoció que "a la hora de pensar este reordenamiento hay cuestiones técnicas que deben ser tenidas en cuenta".

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Operarios desconectaron la antena.

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