"Estamos contentos, pero no es un triunfo"

"Estamos contentos con la decisión de levantar la alcaidía adentro de la Jefatura, pero no es un triunfo. Un triunfo sería que en la zona construyan más escuelas, más bibliotecas o que se resuelva el problema de los jóvenes que están en la calle". La reflexión partió de Gustavo Orrego, el consejero del distrito sudoeste en el Presupuesto Participativo y uno de los vecinos que más rápidamente reaccionó en contra de la construcción del penal en los terrenos adyacentes a Ovidio Lagos al 5200.

Para Orrego, está claro que "la ciudad necesita una alcaidía. No somos irresponsables ni irracionales con el tema", subrayó, pero al mismo tiempo advirtió "la ciudad tiene que considerar que la zona sudoeste también necesita otras cosas", como por ejemplo espacios verdes, lugares de esparcimiento y fundamentalmente nuevas escuelas.

"En la zona hay 10 mil jóvenes que no estudian ni trabajan. Si la provincia y el municipio atacan este problema con el mismo ímpetu con que encaran la construcción de una alcaidía, seguramente los penales ya no serán tan necesarios. Y, además, estarían dando una solución de fondo a los problemas y no sólo mejorando la coyuntura", opinó.