| domingo, 16 de mayo de 2004 | Chocolate: Dosis de energía El chocolate ha sido acusado de provocar enfermedades (alergia, acné, caries, obesidad) de curarlas, de tener poder afrodisíaco, de ser un eficaz tratamiento de belleza. Además de la supuesta "adicción" que provoca su consumo de forma prolongada. Como alimento, el puro es nutricionalmente el adecuado para ser consumido, en especial aquel que contiene un 70% o más de cacao en su composición. En cambio el más consumido, el chocolate con leche, contiene gran cantidad de leche entera y azúcar, y por lo tanto es el menos recomendable.
Aunque no se ven situaciones extremas de personas exigiendo su dosis de chocolate, ingerirlo es placentero. Pero si su consumo es moderado, se trata de una afición muy gratificante y beneficiosa para la salud.
u Sensación de felicidad: el consumo de chocolate induce la producción en el cerebro de una sustancia denominada triptofáno vinculada a la serotonina. Esta hormona es la responsable directa de las sensaciones de tranquilidad, relajación y felicidad. Por eso es el alimento al que se suele recurrir cuando uno está deprimido o ansioso.
u Alivia el síndrome premenstrual: es rico en magnesio, y la falta de este mineral ha sido relacionada por los expertos con los síntomas del síndrome premenstrual. Por eso muchas mujeres aseguran que ayuda a mejorar el estado de ánimo en este período.
u Estimula el organismo: contiene teobromina, alcaloide que tiene efectos directos sobre el organismo. Actúa como diurético y estimula el sistema renal. También ejerce un efecto estimulante del sistema nervioso central similar al de la cafeína.
u Sensación de saciedad: las grasas que contiene provocan una sensación placentera de saciedad. Los carbohidratos presentes en el chocolate hacen que tras varios procesos químicos se incremente la cantidad de oxígeno que llega al cerebro, lo que influye en tener mayor fluidez mental.
u Frena el envejecimiento: al estar compuesto por antioxidantes naturales (polifenoles) actúa como protector frente a las enfermedades cardiovasculares. En una taza de cacao se pueden encontrar hasta 100 mg. de antioxidantes de tipo polifenólico.
El chocolate no puede ser incluido en la categoría de sustancia adictiva, ya que una cosa es el anhelo y otra la adicción.
Un estudio reciente que se realizó para intentar determinar si el chocolate podía seguir el patrón de consumo de una droga, llegó a la conclusión que desde el punto de vista fisiológico sería necesario el consumo de 15 kilos diarios para que un individuo pudiera llegar a tener en el organismo la cantidad de sustancias potencialmente adictivas.
Además de su sabor dulce y su aroma, como materia prima y exento de golosina, el cacao tiene propiedades naturales con beneficios terapéuticos. No en vano los mayas lo denominaban "alimento de los dioses".
Su composición original también contiene hidratos de carbono, proteínas, minerales como el potasio, el fósforo y el magnesio, y vitamina B1 y ácido fólico. Por lo tanto se trata de un alimento excepcional que proporciona grandes dosis de energía nutritiva. enviar nota por e-mail | | |