| domingo, 16 de mayo de 2004 | Dan latigazos "preventivos" a un alcalde Un alcalde de un pueblo del sudeste de Perú recibió tres latigazos como señal de advertencia en caso de que se le ocurra cometer actos de corrupción. El incidente se produjo en el lejano distrito de Asillo, en el departamento surandino de Puno, fronterizo con Bolivia.
En ese mismo departamento, en el poblado de Ilave, indígenas aymaras lincharon a fines de abril a su alcalde a quien acusaban de presuntos actos de corrupción.
Eusebio Quispe Condori, el alcalde flagelado, recibió el castigo al parecer sin protestar de parte de una mujer identificada como Emigdia Sucapuca. Quispe fue designado por mayoría de la población durante una asamblea popular para ocupar la alcaldía por treinta días.
"Fueron tres latigazos con mano fuerte", dijo Victoriano Mayta, un lugareño, quien señaló que los chicotazos fueron un aviso de lo que le podría pasar si no cumple con sus deberes.
El flagelamiento preventivo se cumplió en presencia de alcaldes de localidades vecinas, preocupados de que el ejemplo pueda cundir en la zona. También fue testigo un oficial policial, se informó.
El informante narró que el pueblo de Asillo "tenía mucha cólera" y que por eso se acordó adoptar esta singular modalidad, pues el anterior intendente, Antolín Huaricacha, estaba acusado de presuntos malos manejos.
Huaricacha se puso a buen recaudo lejos de Asillo escapando a eventuales latigazos. (AFP) enviar nota por e-mail | | |