Un cineasta salió a experimentar los horrores de la comida rápida

Comer de mañana, tarde y noche en Mc Donald's es el régimen al que se sometió el realizador de cine Morgan Spurlock para denunciar, en un documental estrenado en Estados Unidos, la "dieta" que hace a los norteamericanos cada vez más gordos. "Super Size Me, o cómo Estados Unidos se hizo tan gordo" es un ataque contra los restaurantes tan rentables de comida rápida. En su crítica, Spurlock, cineasta debutante de 33 años, utilizó los mismos métodos que Michael Moore, el realizador de "Bowling for Columbine": salir en cámara, filmar cámara en mano, variar las técnicas (entrevistas, dibujos animados) y tratar un asunto tan serio con un humor provocador.

Spurlock adopta sin embargo un riesgo adicional al convertirse él mismo en un conejillo de indias. "En la tele, en un programa consagrado a la obesidad, dos niñas explicaban por qué habían demandado a Mc Donald's", recuerda. Cuando un portavoz de la industria alimentaria reaccionó afirmando que esa comida era sana, a Spurlock le hirvió la sangre: "Me dije que mostraría exactamente lo que pasa en Mc Donald's, que iría allí para el desayuno, el almuerzo y la cena durante un mes", relató.

Su novia, vegetariana, lo tomó por loco: "Eso te va a matar", le dijo. Para completar el experimento, se propuso caminar no más de 2.500 pasos por día, como el adulto norteamericano medio. La experiencia fue seguida por tres médicos y un nutricionista, que se felicitaron, a principios del filme, de la buena salud de Spurlock. Al cabo de tres semanas de Big Macs y papas fritas, los médicos se alarmaron.

Spurlock continuó pero en un estado lamentable. En un mes, engordó 12 kilos, su nivel de grasa corporal aumentó un tercio, su colesterol se disparó y su hígado se transformó en paté. Su ánimo declinó y su libido vaciló.

El director reconoce haber conducido una experiencia "extrema", lejos de la realidad de los millones de clientes de Mc Donald's. Pero su objetivo fue llamar a la responsabilidad de los norteamericanos, "muchos de quienes no reflexionan sobre lo que se llevan a la boca", aseguró.