Provincial fue contundente

Los albirrojos consiguieron su primer triunfo luego de su regreso a la categoría

Provincial obtuvo un triunfo importante, ya que fue el primero que consiguió desde que volvió a la máxima categoría del Litoral. Fue una victoria merecida y el encuentro tuvo varias facetas muy interesantes. La víctima fue Old Resian, otro equipo que retornó a la división, quien no pudo imponer su juego y terminó perdiendo 37-8.

En el comienzo del enfrentamiento parecía que los de Fisherton se iban a llevar el partido, ya que fueron ellos los que salieron a buscar el resultado, presionando y poniendo el juego en el campo rival. Sin embargo, se encontraron con una defensa muy bien parada.

Hasta ese entonces, la única salida que encontraba Provincial era patear afuera y buscar que su rival retroceda. Pero todo eso cambió cuando el segunda línea Sebastián Pintos encontró el camino. Se desprendió de un maul, buscó el espacio entre los centros, algo que después le siguió dando rédito, y con el apoyo de un compañero apoyó en el ingoal.

El entretiempo fue el punto de inflexión. Una vez finalizada la primera mitad, los de Provin habían leído bien el partido y actuaron en consecuencia. De ahí en más fue un monólogo. Los albirrojos, sin desordenarse, hicieron hincapié en el ataque por el centro de la cancha y apoyaron en varias oportunidades, incluso con cierta facilidad.

En tanto, Old Resian no encontró respuestas. Más allá de no poder parar a su rival de turno, no tuvo las armas para dañar la defensa albirroja. Con los tres cuartos no pudo y con los forwards casi ni lo intentó.

Igualmente llegó cerca del ingoal rival en varias oportunidades pero sus propios errores fueron grandes protagonistas del partido, tanto en ataque como en defensa.

En ofensiva, los de Fisherton pudieron ganar importantes metros cuando la pelota le llegó al wing Guillermo Fantoni, quien le imprimió explosión y velocidad al juego logrando siempre grandes avances. Pero finalmente siempre era detenido. Ese era un camino pero el wing no encontraba correspondencia y ante la superioridad numérica del rival, siempre sus ataques morían en el intento, como lo hizo todo el equipo.