| sábado, 24 de abril de 2004 | Las críticas a un Estado ausente que todavía se hacen escuchar En enero de este año el Ministerio de Educación de Santa Fe adjudicó las obras licitadas oportunamente para recuperar las escuelas afectadas por la inundación. "Las obras que no terminaron todavía es porque aún están dentro de los plazos de la licitación, y porque seguramente coincide con las más castigadas en ese momento por el agua", señaló una alta fuente de Educación provincial. Al respecto agregó, que oportunamente la titular de la cartera del área, Carola Nin, recorrió las escuelas dañadas.
La misma fuente aseguró que "se trabajó para garantizar el inicio del ciclo lectivo y la atención a los alumnos, por eso en las escuelas donde no podían funcionar los comedores -por ejemplo- se buscó que fueran atendidas por otros establecimientos educativos".
Si bien a nivel oficial se han realizado los relevamientos correspondientes en las 30 escuelas directamente afectadas por la inundación, los datos aportados por Amsafé afirman que en su gran mayoría las obras de restauración se encuentran sin terminar. En algunos de esos establecimientos educativos, como el Centro de Educación Física Nº52, de Santa Rosa de Lima (que carece de agua, electricidad y teléfono) o la Escuela Avellaneda de barrio Roma, aún hoy no se han podido reanudar las actividades normalmente. En la Escuela Echagüe, de Entre Ríos y Zavalla, este año las tareas comenzaron con extremas dificultades porque gran parte del edificio sigue aún sin repararse.
Las que han superado los inconvenientes lo han logrado gracias a las donaciones, como ocurrió con la Escuela Nº 1.111 Luis Borruat, que fue apadrinada por la General Motors y por eso pudo ser reinaugurada en fecha muy reciente, y también debido a la tarea extraordinaria de las cooperadoras, a la acción voluntaria de docentes, padres de alumnos, los propios escolares, los vecinos y esos solidarios anónimos que tanto trabajo cumplieron a cambio de nada, salvo la de sentirse copartícipes de un esfuerzo en común.
"Aún heridos" En un total de 60 escuelas públicas funcionaron los centros de evacuados, pero fueron más de 100 los establecimientos educativos utilizados en la emergencia, incluyendo las escuelas privadas de Santa Fe, Santo Tomé y San José del Rincón.
La ausencia de teléfonos afecta todavía hoy a muchas escuelas de la zona oeste, comenta Gabriela Questa, del gremio de los maestros y docente de educación física. Agrega que, como contrapartida al panorama que ofrecen muchos establecimientos educativos aún "heridos" por el fenómeno hídrico, el Instituto de Educación Física al que concurre como docente se encuentra en óptimas condiciones "porque recibimos aportes de todos los institutos del país y porque la cooperadora aportó dinero".
Las críticas al Estado ausente y/o reticente fue lo más escuchado en esta recorrida que realizó La Capital cuando se cumple un año de la catástrofe que tanto daño causó a Santa Fe y sus regiones vecinas. enviar nota por e-mail | | |