Figueroa: Los nervios a full desde el Distrito

Mariano Bereznicki / Ovación

Su delgado y acelerado tono de voz denota la ansiedad que envuelve al goleador que ahora hace estremecer a los hinchas de Cruz Azul en tierras aztecas. La imagen de Luciano Figueroa aún está bien impresa en cada corazón canalla. Y máxime aún cuando se acerca el clásico de la ciudad. "Estoy muy ansioso. No veo la hora de que sea el día del partido para poder escuchar la radio por Internet", confesó desde la distancia Lucho, con cierta dosis de melancolía por no poder estar en la cita de hoy en el Gigante de Arroyito, la más importante para el pueblo futbolero rosarino.

-¿Y qué hacés para calmar esa ansiedad?

-No puedo hacer nada desde acá. No me queda otra que esperar el partido.

-¿Entraste esta semana a Internet para saber y seguir más de cerca lo que pasa en Central?

-No pude entrar todos los días, aunque leí algunas cosas que sacaron en el diario. Pero estoy bastante al tanto de lo que pasa en el plantel.

-¿Y hablás con algunos de tus ex compañeros?

-Sí, con la mayoría. El otro día me mandó un e-mail el Oveja (Talamonti). Con Mariano (Messera) hablé por teléfono en la semana. Siempre trato de hablar con algunos o de preguntar cómo están los muchachos.

-¿Tenés alguna cábala?

-No.

-Cuando jugabas en Central, ¿la tenías?

-La única que tengo es llevar siempre una remera con la imagen de mi hermano (Martín) debajo de la camiseta que juegue. Pero en Central, antes de los partidos, mi papá se daba una vuelta por la concentración y hablábamos un buen rato.

-¿Cuánto darías por estar en el Gigante?

-Todo. Es un clásico y todos saben lo que significa eso.

-Y ni hablar de poder estar dentro de la cancha

-Me muero por no poder estar ahí adentro y encima viendo la popular de Central a full.

-¿Cómo definirías al hincha de Central?

-Como el mejor de todos. Es el más apasionado y un fiel seguidor de su equipo.

-¿Cuando se acerca el partido con Newell's, te vienen a la memoria los dos goles que le hiciste?

-Sí, cada vez que se acerca un clásico me vienen a la memoria los dos goles. Esos recuerdos son imborrables.

-¿Qué es lo que más extrañás del clásico?

-La gente de Central, la semana previa y los hinchas alentándote en las calles o en las prácticas.

-¿Qué hacías la mañana del partido?

-Miraba a cada rato el reloj para ver cuánto faltaba para jugar. Después, cuando empezaba, me calmaba un poco. Y en lo personal esperaba a mi viejo para hablar un rato.

-¿Lo disfrutabas o era tanta la presión que te obligaba a estar concentrado en todo momento?

-La presión siempre está. Y más para ganar el clásico. Por dentro lo vivía con euforia y no lo disfrutaba hasta después del pitazo final. Lo que pasa es que en el momento del partido trataba de no perder la concentración e intentaba hacer bien las cosas para ganarlo. La verdad es que recién comenzaba a disfrutarlo cuando estaba por terminar el partido y veía a la gente de Central cantando y alentando. Eso sí que se disfrutaba siempre.

-¿Cómo lo ves a Central para este partido?

-Bien y con un buen envión anímico. Sobre todo porque viene de ganar por el torneo local y la Copa Libertadores de América.

-Mirá que no estarán Carbonari, Messera y Rivarola. Además hay varios que no llegan en óptimas condiciones.

-Está bien, pero más allá de eso le tengo mucha fe al equipo para ganar. Porque al que le toque entrar, estoy seguro que lo hará lo mejor posible por el amor que se siente por la camiseta de Central.

-¿Qué es lo que más te preocupa de ellos?

-Tienen un buen equipo. Pero Central se tiene que preocupar por sí mismo.

-¿Cómo se le gana a Ñuls?

-Con muchos huevos, concentración y jugando bien al fútbol. Como lo hace siempre Central.

-¿Tirá un resultado?

-No, no me gusta aventurar un resultado. Los partidos hay que jugarlos y ganarlos.

"No veo la hora de que empiece", dijo Lucho desde México.