Mil cien efectivos para asegurar la paz

El operativo de seguridad que dispondrá mañana la policía de nuestra ciudad de cara al clásico que disputarán Central y Newell's fue presentado ayer en una rueda de prensa realizada en la Jefatura por el comisario Jorge Haro, jefe de la División Operaciones, que tendrá a cargo la seguridad del partido. De la reunión también participaron el comisario mayor José Maldonado y el comisario inspector Héctor Hermida y en la misma se informó que el dispositivo contará con la participación de 1.100 efectivos.

El operativo que llevará a cabo la fuerza policial comenzará entre las 8 y las 9 de mañana en los lugares donde generalmente se reúnen simpatizantes tanto de Central como de Newell's. En las inmediaciones del estadio el control arrancará a las 10, según informó el comisario Haro.

Además, este partido también contará con la presencia de ocho cámaras que serán destinadas a filmar todos los movimientos que puedan realizar ambas hinchadas.

La parcialidad visitante deberá ingresar por boulevard Avellaneda, tomar José Ingenieros, pasaje Fernández e ingresar por las puertas 3 y 4, como lo hace habitualmente en la cancha de Central.

En cuanto a los locales, deberá hacerlo por el resto de los accesos, es decir Cordiviola, boulevard Avellaneda y parte de avenida Génova (puertas 5 y 6).

La policía acompañará a la hinchada rojinegra debido a que esta deberá desplazarse desde su estadio hasta el Gigante de Arroyito.

Los cacheos previos al partido no variarán en cuanto a los que se desarrollan habitualmente. Los mismos serán tres: uno en las calles aledañas al club, otro en los accesos de ingreso y el último en la puerta, antes de ingresar.

Además, hoy tendrán lugar inspecciones en el estadio con la finalidad de detectar algún tipo de elemento no permitido. De las mismas participarán miembros de la comisión directiva del club de Arroyito e integrantes de la División Explosivos de la policía de la UR II.

Además, el comisario Haro manifestó que ya conocen, supuestamente, las ubicaciones que toman los considerados barras bravas dentro del estadio.

Una vez finalizado el encuentro, será anunciado por los altoparlantes del estadio cuál de las dos parcialidades deberá retirarse primero de la cancha, según lo determine la policía, dependiendo esta medida del resultado del cotejo.

También está previsto la custodia de lugares que generalmente son utilizados por los simpatizantes para los festejos como el Monumento a la Bandera, avenida Pellegrini, 27 de Febrero, el estadio de Ñuls y el de Central, entre otros.

Hasta ayer no existía ninguna prohibición en cuanto a la concurrencia de algún simpatizante tanto de Central como de Newell's al estadio. Por otro lado, se recomendó a los futbolistas no realizar ningún tipo de burlas o festejos desmedidos, ya que los mismos serán sancionados por transgresión al Código de Faltas de la provincia de Santa Fe. Y una vez que termine el partido, hasta que se realicen los trámites legales correspondientes, el jugador va a quedar demorado.

"Nuestra intención es transmitirle a la gente, a través de los medios de comunicación, la tranquilidad necesaria para que vaya sin problemas a la cancha", finalizó el comisario Hermida.