Bush respalda las colonias judías y rechaza el regreso de los palestinos

El mandatario estadounidense calificó el plan de retirada israelí como un "paso valiente". Malestar de los árabes

Washington. - El presidente George W. Bush dio un importante giro en la política de EEUU hacia Medio Oriente en respaldo al primer ministro israelí Ariel Sharon, al rechazar las fronteras de 1949 y el regreso de refugiados palestinos a Israel, dando luz verde al avance de la colonización judía en Cisjordania. Bush calificó la propuesta de Sharon de evacuar Gaza y algunas zonas de Cisjordania como "acciones históricas y valientes", en una conferencia de prensa conjunta con Sharon tras una reunión en la Casa Blanca.

El jefe del gobierno palestino Ahmed Qureia declaró inmediatamente que el apoyo estadounidense al plan de Sharon es inaceptable y una violación de la "hoja de ruta" para la paz en Medio Oriente, presentada por Washington, la Unión Europea, Naciones Unidas y Rusia".

En una posición que no será fácilmente aceptada por el mundo árabe, Bush se alineó también junto a los israelíes en otro tema sensible, estimando que los refugiados palestinos deberán instalarse en el eventual Estado que surja de las negociaciones de paz, en lugar de retornar a Israel. "A la luz de la nueva realidad en el terreno, que incluye la existencia de importantes centros poblados israelíes, es irrealista esperar que el resultado de las negociaciones sobre el estatus final, sea un retorno total y completo a las fronteras del armisticio de 1949" (que excluía Gaza, la península del Sinai, Cisjordania y la meseta del Golan), dijo Bush.

Durante décadas, tanto en gobiernos demócratas como republicanos, EEUU han visto los asentamientos judíos en territorios ocupados como un obstáculo para la paz. Pero ahora Bush ha cambiado esta política y considera a algunos de dichos asentamientos como un hecho consumado.


Obstáculo a la paz
Israel ha establecido unos 120 asentamientos en Cisjordania desde que se apoderó de la región junto con la Franja de Gaza en la guerra de 1967. También en Jerusalén han surgido grandes zonas judías, algunas de las cuales fueron construidas sobre terrenos ocupados. Aceptando una solicitud clave israelí, Bush declaró en un comunicado emitido por la Casa Blanca, que luego de retirarse, Israel "mantendrá su derecho" a atacar a militantes palestinos en la franja de Gaza.

En Cisjordania, el premier palestino afirmó: "No podemos aceptar. Esto será decidido en negociaciones. No puede ser decidido por el presidente de EEUU qué es realista y qué no lo es. No es realista que los israelíes ocupen territorios palestinos, no es realista que los israelíes construyan un muro de separación en territorios palestinos", afirmó Qureia. "Esto es una violación de la hoja de ruta". El ministro de negociador palestino Saeb Erakat dijo que "Bush no tiene derecho a negociar en nombre del gobierno palestino, cambiar resoluciones de la ONU, los acuerdos sobre la «hoja de ruta»".


Muro temporario
Bush reiteró su apoyo a la "hoja de ruta" que propone la eventual creación de un Estado palestino, pero declaró que "si los palestinos quieren un Estado, deben combatir el terrorismo".

El presidente estadounidense se apartó de la posición israelí solamente al afirmar que la barrera de seguridad que construye Israel en Cisjordania debe ser temporaria. "La barrera que Israel está construyendo en el marco del esfuerzo para mejorar la seguridad, debe, como vuestro gobierno ha indicado, ser una barrera de seguridad y no política. Debe ser temporal en lugar de permanente y no predeterminar soluciones definitivas sobre el estatus, incluido el trazado de fronteras", afirmó el mandatario estadounidense.

Israel alega que el controvertido muro ayudará a contener ataques, pero los palestinos afirman que implica la apropiación de tierras y un intento de predeterminar las fronteras del futuro Estado.

El apoyo de Washington ayudará a Sharon en la elección interna de su derechista partido Likud que se celebrarán el mes próximo. El premier israelí, que en la década de 1970 emergió como el arquitecto de un plan de expansión de asentamientos, encabeza un partido de derecha que considera a Cisjordania como parte de los territorios bíblicos de Judea y Samaria que Dios entregó a los judíos. Hay unos 230.000 colonos judíos y 2,3 millones de palestinos en Cisjordania. En la Franja de Gaza hay 1,3 millón de palestinos y 7.500 colonos israelíes, que viven en asentamientos aislados y fortificados que serán evacuados para satisfacer el plan de Sharon. (AFP y Reuters)

Sharon recibió un importante espaldarazo de Bush.