| miércoles, 14 de abril de 2004 | Imprecisiones Dos de los policías que declararon ayer estuvieron a cargo del operativo en el que quedó detenida una de las imputadas, Viviana Mendoza, una joven que vivía con su hermana y colaboraba con el Centro Comunitario del barrio Las Flores antes de su detención. Increíblemente, los uniformados no pudieron dar detalles del procedimiento que ellos mismos ejecutaron. Ni siquiera lograron recordar, pese a los esfuerzos de Tribunal, en qué lugar físico se encontraba el dinero que le incautaron a Mendoza en el allanamiento a su casa.
Allí la policía halló 99,9 gramos de marihuana, fraccionados en siete envoltorios de nailon. Lo llamativo es que los policías iban con una orden de allanamiento a nombre de la hermana menor de la mujer, Mónica, quien en ese momento no estaba. Viviana quedó detenida.
El sargento ayudante Raúl Pérez no pudo responder de dónde salió el dinero que, según la acusación, se había obtenido por la venta de estupefacientes. "No sé si el dinero estaba adentro de una caja. O en la parte de arriba de la heladera. O en algún ropero. O lo tenía la chica. O en una bolsita. O disperso en la caja. Eran monedas. O billetes. No estoy muy seguro", consignó. El hecho de que la droga estuviera fraccionada le valió a Viviana una acusación por comercialización, delito que no es excarcelable. El comisario Carlos A. Rodríguez dijo que era "subdistribuidora". enviar nota por e-mail | | |