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 sábado, 10 de abril de 2004

Drama en una casa de Pasaje Volta al 6500
Una nena de 12 años murió baleada al disparar por accidente un revólver
Encontró sobre una cama un "matagatos" que pertenecía al hermano y se disparó por accidente un tiro en la cara

Los investigadores policiales dicen que por ahora se trata de un accidente. La familia Guzmán, sumida en una tragedia espantosa, jura que así fue. Una chica de 12 años murió al recibir un balazo en la cara, ocasionado cuando manipulaba un revólver en miniatura matagatos de su hermano, apenas cinco años mayor que ella. El muchacho guarda objetos antiguos como partes de armas, monedas, billetes y hasta algunas estampillas, y el artefacto se lo había regalado su padre para que lo incorporara a su colección.

La desolación de los Guzmán no tiene límites. Andrea Mariana murió cuando la llevaban de urgencia al Hospital Vilela. Una bala calibre 22 le ingresó por la nariz y quedó alojada en el cerebro. Sobrevivió los minutos que tardaron en llevarla de su casa, de pasaje Volta 6559, al Hospital Carrasco y de allí, debido a la gravedad de la herida, hasta el nosocomio de Virasoro y Dorrego. En este último centro asistencial, los médicos ya no pudieron hacer nada por ella.

La seccional 32ª, que tiene jurisdicción en el lugar del hecho, y la Brigada de Homicidios, que colaboró también en el caso, tienen caratulado el caso como "muerte dudosa", pero los testimonios recabados de familiares y amigos de la víctima los inclinan a pensar en que todo fue un hecho accidental.


Descuido fatal
Todo ocurrió alrededor de las 23 del jueves. Unos minutos antes la familia había recibido la visita de un amigo. Miguel, el papá de Andrea, con una voz apenas audible contó: "Estuvo un amigo y le mostramos el revólver que el nene tenía guardado dentro de una cartuchera para lápices. Después el pibe se vino conmigo para llevar a esta persona a la casa y se ve que (el arma) quedó por ahí y la nena de curiosa que es,la agarró". Miguel y sus familiares aseguraron que fue un accidente. "Ahora mi hijo está con la culpa de que todo esto pasó porque dejó el revólver ahí nomás", remarcó.

Sandra Guzmán, tía de Andrea, también refrendó la versión del accidente. Después nadie más quiso hablar del tema en la casa de Volta al 5900.

Según fuentes policiales el arma en cuestión es un revólver de "acción simple", es decir que carga una sola bala calibre 22 porque carece de tambor. "Es una miniatura muy linda a la vista, conocida popularmente como matagatos que debe medir menos de diez centímetros de longitud", describió un vocero de la investigación. Al parecer, el hermano de Andrea, cuyo nombre no trascendió, dejó el arma en su cuarto, sobre la cama. Entonces la chica la manipuló y aparentemente se le escapó un tiro.

"La bala le impactó en la fosa nasal derecha con una trayectoria bien marcada de abajo hacia arriba y quedó incrustada en la cabeza. Por la zona en donde pegó la bala se produjo una hemorragia tremenda", graficó el vocero. En la casa, estaban la madre de la nena y dos hermanas, de 14 y 3 años. La mujer levantó a su hija como pudo y logró llevarla con vida hasta el Hospital Carrasco. Pero debido a la gravedad de la herida se decidió derivarla al Vilela, donde llegó prácticamente sin vida.

La seccional 32ª tomó conocimiento del hecho por medio del destacamento policial ubicado en el Carrasco. Cuando los uniformados llegaron a la casa de Volta al 6500 se encontraron con la hermana de Andrea de 14, a quien su mamá había dejado a cargo de la más chiquita mientras corría hacia el hospital. En ese lugar, la chica les contó a los policías lo que había pasado. Después inspeccionaron el lugar y hallaron el pequeño revólver sobre una cama manchada con sangre.

Lo que primero llamó la atención fue que el dueño del arma sea un chico de 17 años. Indagando en ese sentido, los investigadores establecieron que el adolescente tenía por costumbre juntar o coleccionar armas o partes de armas antiguas. "Lo que más tenía era basura o artefactos en desuso, pero también había un revólver 38 lechucero", comentó un vocero de la 32ª.

Entre las cosas que el menor guardaba, la policía halló, además de balas de distinto calibre, un fusil Remington de un solo tiro, un arma antiquísima que no funcionaba; un pistolón chico en mal estado; un cañón con cerrojo Mauser; otro cañón chico, presumiblemente de un arma de puño; el mencionado 38 con su tambor vacío y una caja de madera con la inscripción Smith & Wesson con un revólver calibre 44 y varios cartuchos en su interior.

La policía también estableció que el chico coleccionaba monedas y billetes antiguos. En cuanto al arma fue secuestrada para someterla a pericias.

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La tía de Andrea Guzmán, conmocionada por el trágico accidente.

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